Tras la histórica temporada de Tadej Pogacar, muchas han sido las voces que han situado al esloveno como una amenaza para el otrora inabordable Merckx. Cortas parecían quedarse las hazañas de Coppi o Hinault, las cabalgadas de Pantani o el dominio de Armstrong, de Sky o de Jumbo.
Y era ese el momento de tirar de hemeroteca, y al menos yo no encontraba parangón en victorias del calibre de las de Pogacar y en la forma de conseguirlas, en una temporada, ni tan siquiera en Merckx.
Y es que la primera barrera comparativa se situaba en la triple corona, y ahí entraban Roche 87 y Merckx 74, pero claro, Roche sufrió para conseguir cada uno de esos tres triunfos, siendo especialmente agónica su victoria en el Tour, «desmayo» en la Plagne mediante. Y con aquel Merckx otoñal, la comparativa es muy desequilibrada a favor de Pogaçar. Primero porque aquel Merckx no ganó ninguna gran clásica/monumento y además sufrió como nunca para ganar por apenas segundos en el Giro, sin contar que el hombre más fuerte de la carrera, Fuente, dilapidó sus opciones camino de San Remo yendo de líder y a pesar de acabar 5° no paró de instigar y exigir al belga hasta la última etapa. Y en el mundial Merckx no solo no se fué en solitario como Pogacar sino que tuvo que ir toda la carrera a la contra gracias a la estrategia y poderío de la selección francesa, con un Thevenet desatado y con un Poulidor que sería plata llegando con Merckx.
Una vez superada claramente esta primera barrera, la segunda para Pogacar era la temporada 72 de Merckx, que al menos en mi opinión es más exitosa que la de Tadej a pesar de no tener el mundial (sí el récord de la hora, que supuso para el belga llevar su cuerpo a límites insospechados), pero sí 3 monumentos, muchas victorias yel doblete Giro-Tour.
Pero claro, Merckx sufrió en el Giro, tuvo que improvisar y luchar contra un Fuente que al igual que pasaría en el 74 se negaba a rendirse y que tras ir de rosa durante las primeras etapas le ponía en dificultades camino de Jafferau en etapa mítica que terminaría ganando el caníbal y lo batiría en el Stelvio dando un recital.
Y claro, eso decantaba para mi la balanza a favor de Pogacar, que no sufrió en ninguno de sus objetivos del 24.
Y cuando estaba con la idea clara que la temporada 2024 es la más exitosa y apabullante de la historia del ciclismo, me entraron dudas con un año, y no un año cualquiera, sino el año en que Merckx empezó a dar miedo y ser catalogado como el caníbal…la temporada de 1969.
Y es que aquel año Merckx ganó mucho y bueno y a lo Pogaçar este año.
Ganó su tercera San Remo, su primer Flandes (yéndose en solitario a 70km de meta, ¿nos suena?) entre voces de su director Lomme Driesens de que no atacara tan pronto y contestaciones para la historia de Merckx…»kiss my ass»…sacando más de 5 minutos al segundo, Gimondi, y casi 15 minutos a muchos favoritos, y «sólo» pudo ser segundo en Roubaix.
Pero no era solo eso. Tras ser derrotado en la Flecha Valona, declaraba que iban a ver quién eta el más fuerte, y apenas días después atacaba a 100km de meta (2024 style) y cazaba a dos compañeros por delante que iban en fuga para llegar a meta con su compañero Van Schil (al que no había querido dejar atrás) con una ventaja sobre el grupo de 8 minutos…
Y claro, esto junto al doblete Giro-Tour 69 con insultante superioridad del belga hace que podamos comparar aquella temporada con esta perfectamente.
Y quedando aún el mundial y Lombardía en el horizonte.
Pero aquí es donde el destino fue caprichoso. Volvamos meses atrás, al Giro del 69 dónde un Merckx cómodo lideraba la carrera, con 2 etapas ganadas y con casi 2 minutos sobre Gimondi, cuando saltaba el bombazo. Merckx había dado positivo (un muy contrivertido positivo) y debía abandonar la carrera entre lágrimas y jurando que no volvería correr nunca (y con la sanción de un mes por el positivo se perdería el que iba a ser su primer Tour…posteriormente y tras alegaciones la sanción se reduciría y podría correr en Francia).
Imaginen el hambre y la rabia de un joven Merckx que se sentía robado…pues toda esa ira la desató en el Tour con 6 etapas, ganando todos los maillots, la combatividad, dejando a más de 17 minutos alsegundo,Pingeon, y casi media hora al cuarto, el que había cogido el liderato y ganado finalmente el Giro, Felice Gimondi
Y todo, por no hablar de su «ataque» en el descenso del Tourmalet, yendo de amarillo a más de 140km de la meta en Mourenx para ganar en solitario en una de las mayores exhibiciones, si no lamayor de la historia del ciclismo. ¿Les suena?, bueno, Pogaçar no ha hecho ninguna locura tan bestia…pero casi…
Así que el doblete interruptus del 69 coloca para mi a Pogaçar 24′ a nivel resultados, que no físico (ahí muy parejos aunque quizás ganaría para mi por poco Merckx), por delante.
Pero, y si Merckx hubiera ganado el mundial (abandonó) o su cuarto monumento en Lombardía (no pudo el belga participar tras su accidente días antes en el velódromo de Blois , que a punto estaba de dejarnos sin Merckx y en el que fallecía su piloto…eran carreras tras derny…).
Destino caprichoso, fortuna esquiva, que hace que los resultados no se puedan comparar…y solo imaginar…
Resumiendo, el Merckx 69 fue tan o más dominante quizás que el Pogacar 2024, pero la dichosa fortuna dictó que se quedara un poco «a medias» aquello, y la que ha sido la temporada más descomunal que mis ojos hayan visto, esta de 2024, se convierte para mi en ganadora a temporada mejor histórica, aunque casi en foto finish…quién me iba a decir a mi que iba a escribir en mi vida sobre algún ciclista que hiciera palidecer registros de Merckx…
De Sevilla, Pedro García Redondo es una auténtica referencia en cuanto a historia del ciclismo se refiere. Una auténtica enciclopedia de la historia ciclista, es toda una autoridad en la materia, siendo uno de los historiadores de ciclismo más certeros y respetados. Ahora dirige la sección histórica en Le Puncheur, además de escribir artículos que nos hacen viajar a épocas pasadas y revivir las gestas de ciclistas que ya no están en activo.