La encrucijada de Sergio Samitier en 2024

Llega 2024 y, con él, el último año de contrato de Sergio Samitier en Movistar Team. Ciclista del 1995, portador de la ‘M’ en el pecho del maillot casi siempre azul desde 2020, es difícil entender la inestabilidad del aragonés en la plantilla del equipo español. Con tanto ir y venir de corredores, intereses y meses, se entiende bien poco que este oscense natural de Barbastro haya disfrutado de tan pocas oportunidades en ciertos escenarios. Hablo de Grandes Vueltas o, en su defecto, de pruebas de menor duración, pero igualmente de gran nivel. La sensación que da es que Samitier entra en las alineaciones como ciclista de relleno en pruebas que carecen del máximo interés para la escuadra. Sensación, ojo.

El último episodio, la Milán-San Remo. Sergio entró en un siete que no alineaba, por ejemplo, a Iván García Cortina, que iba a preparar las piedras en la Volta a Catalunya en su lugar. Porque se me ocurren pocos ciclistas más rápidos en la plantilla para una carrera y recorrido así. Y, sin embargo, las prioridades pasan a ser otras. ¿Cómo puede no ser una prioridad la Milán-San Remo? Durante años, por cierto, Alejandro Valverde ha declarado que no ha corrido más esta prueba porque coincidía con la Vuelta a Murcia. Con todos los respetos para el murciano y para la carrera, ¿cómo se ha podido permitir? Sencillamente porque la ‘classicissima’ no cuente con el interés prioritario de la dirección del equipo. No cabe otra explicación.

De esa forma, se incluye a Sergio Samitier en esta carrera, como un relleno más. La actuación del aragonés no pudo ser más sobresaliente. Hasta la caída que heló la sangre a todos los televidentes. El de Movistar iba en cabeza de carrera, peleando en fuga por ser protagonista. En el descenso de La Cipressa sufrió una dura caída que finalmente quedó por fortuna en un susto.

2024, si dejamos de lado la Strade Bianche, vuelve a ser un año donde va esquivando pruebas por etapas de gran nivel. Al menos hasta la fecha. En su día ya aventuramos el desconcierto que genera que el altoaragonés no fuese seleccionado como rutina para las mejores citas del calendario. Todo tras haberse clasificado 13º en un Giro de Italia, o haber sido de los más fuertes en una Clásica de Jaén que sin Pogačar en liza a saber cómo hubiese finalizado.

Si en 2023 titulamos «las injusticias con Sergio Samitier», en esta ocasión titulamos con la encrucijada, el cruce de caminos que vivirá en este 2024. Las renovaciones se han dado tardías en los últimos años en casa de los Movistar. Esa inquietud generada fue librada por Samitier por tener un año más de contrato. Pero la situación cambia totalmente de cara al otoño de 2024. En diciembre cumple su contrato con los telefónicos y quién sabe cuál será el destino que tome su trayectoria. Uno de los caminos, como es evidente, es la continuidad y la renovación de su estancia en la plantilla azul. El problema es que su brillo se ve reducido a carreras más modestas y a labores de equipo en su gran mayoría.

Con esa perspectiva esperando a la vuelta de los meses, el ciclista de Movistar vivirá uno de los momentos más importantes de su carrera deportiva. Es un corredor con buen cartel en España, por lo que es fácil pensar que la trayectoria del ex de Euskaltel tendría continuidad en otro destino. Si bien, lo deseable por todas las partes es que Samitier pudiese ser parte del World Tour por más tiempo. Como no habrá respuestas hasta bien entrado el otoño, es turno para el ciclista de arrimar el hombro en todos sus cometidos e intentar destacar individualmente por si hiciese falta que la flauta suene. Es el dilema que siempre atormenta cuando la incertidumbre empieza a llamar a la puerta. Por lo que se ha hecho público, el equipo parece estar contento con el corredor.

No habría ningún indicio que conduzca hacia la puerta de salida. Tampoco lo había para pensar que Erviti y Rojas, dos históricos de la formación, no iban a renovar su contrato. A excepción del subjetivo precario uso de un ciclista que ha demostrado tener mucho más dentro. Dos veces ha sido elegido para competir en el Giro de Italia y una menos en la Vuelta a España. En la española se clasificó tercero en la clasificación de la montaña. En Italia logró alcanzar el decimotercer puesto de la general final, un resultado bastante digno con notable presencia en las escapadas.

De ahí en adelante, no ha vuelto a ser considerado para ninguna de las tres grandes del calendario. Ni para Monumento alguno. En Strade fue importante como gregario. Pero quienes se lucen son otros, como Davide Formolo, quien hizo una muy buena competición para Movistar.

Queda por ver cómo se configura por fin su calendario, pero vista la trayectoria sería improbable que Samitier fuese parte de las Ardenas o de carreras del World Tour más allá de las dos españolas (Volta e Itzulia), donde además ha brillado con luz propia luciendo este mismo maillot. Si desde 2020 no ha competido en ninguna ronda de tres semanas, es fácil que en Movistar tuviese opción de completar el ocho del Giro de Italia. El buen trabajo que realizó en el Tour de Colombia para Nairo Quintana tendría continuidad, seguro. El Giro es la grande menos valorada internamente en Movistar y por ello sería casi imposible ver a Sergio en la Vuelta o en el Tour, donde habrá una lucha encarnizada por entrar en el equipo. También en el del Giro, pero en la italiana se sabe bien que los líderes de la escuadra española esquivarán participar.

Con algún ciclista clave como Oier Lazkano por renovar a final de temporada, el caso de Sergio Samitier podría pasar a un segundo plano en las prioridades y preocupaciones de los mandamases del conjunto español. Si eso sucede, la incertidumbre de continuar o no en el World Tour permanecerá en el ciclista hasta casi el final del cuento. Esperemos que, llegado el caso, renueve o al menos cuente con tiempo para poder rehacerse y encontrar un nuevo destino antes de que el resto de las plantillas estén completas. Seguro que una y otra parte encuentran la mejor opción. Pero que al menos veamos a Sami en carreras de primer nivel alguna vez. Por si se le ocurriese repetir la experiencia del Giro 2020. Que sí, que no fue el mejor Giro de la historia. Pero otros muchos tampoco consiguieron esa posición con mucho más lustre teórico que el español.

Fotos: Getty / Movistar