La edición del Tour de Francia de 1964 es posiblemente una de las más emocionantes que se recuerda, con la puesta en escena de rivalidades nacionales francesas ya establecidas: Anquetil vs. Poulidor, y la aparición de la nueva rivalidad española: Bahamontes vs. Jiménez.
Esta edición del Tour contaba con un recorrido inusual: Pirineos después de Alpes y la inclusión del Macizo Central, concretamente con el volcán de los españoles, el Puy de Dôme. El roadbook presentaba una carrera de 5.504 km divididos en 22 etapas, de las cuales la tercera, décima y vigésimo segunda estaban divididas en dos sectores. En las tres, el segundo sector era una contrarreloj, y no se piense que el sector matutino era corto: 196,5 km, 187,5 km y 118,5 km en las etapas matutinas, y contrarrelojes de 21,3 km, 21 km y 37,5 km respectivamente. Además, y muy al contrario de lo que sucede hoy en día, aún contaba con una crono más, individual, en la etapa 17, de 42,5 km. Spoiler: como era de esperar, todas las cronos individuales fueron ganadas por Anquetil, y la de equipos por el mítico Kas.
Dos factores añaden un poco más de épica a este Tour para quien esto escribe: el año de mi nacimiento (sí, 60 años ya han pasado) y la primera visita a mi país, Andorra. Era el Tour más internacional hasta la fecha, atravesando siete países, aunque fuese de manera breve: Francia, Bélgica, Alemania, Luxemburgo, Mónaco, Andorra y España.
Y es que en el Tour 1964 hubo de todo: rivalidades nacionales consolidadas, rivalidades nacionales incipientes, adivinadores con poderes paranormales, apariciones súbitas en la niebla… y una de las fotos más icónicas de todos los Tours: el apoyo entre hombros de Raymond el segundón y Maître Jacques subiendo el Puy de Dôme. Pero dejemos de adelantar acontecimientos y centrémonos en la explicación de lo que sucedió.
Como este Tour es cosa de dos parejas de baile, vamos a centrarnos en los éxitos parciales conseguidos por los 4 Fantásticos (sí, ya había Tours protagonizados por cuatro corredores y los demás por detrás, no es exclusivo de este año 2024) y haremos unas instantáneas de lo que sucedió y lo que dicen que sucedió en cada una de estas etapas. Bueno, como el idioma oficial del pelotón ya no es el italiano ni el francés, sino el inglés, haremos snapshots (viene a ser lo mismo, pero en más chulo 😎).
Snapshot#1: Etapa tercera segundo sector CRE 21,3 km
¡Esta etapa sí que ya no la encontramos en Tours como los actuales! Dos sectores, uno en línea y otro CRE, pero no se imaginen que el sector “matutino” en línea es cualquier cosa, ¡no, 197 km! Entre Amiens y Forest en Bélgica, curiosamente hay un error en el roadbook oficial y en ciertos puntos pone 147 km en lugar de 197 km. Miren Google Maps y verán que la distancia más larga es la correcta. Sector matutino ganado por Bernard Van De Kerckhove que se pone de líder y en la CRE… ¡Cómo añoramos los aficionados españoles al equipo KAS! Ganada por ellos, aunque no logran sustraer el liderato al belga.
Jiménez 1 Resto 0
Snapshot#2: Octava etapa Thonon les Bains-Briançon 248,5 km
Etapa alpina con Télégraphe y Galibier (subiéndolo por Valloire, que es la cara difícil). La cima del Galibier a 33,5 km del final y como ya saben todo bajada a Briançon (bajada que obliga a ir concentrado y que resulta agotadora). Bahamontes ataca, Poulidor intenta seguirle pero no puede, en la meta final Federico se la lleva por 90 segundos y demuestra que el mejor escalador sigue siendo él.
Bahamontes 1 Jiménez 1 Resto 0
Snapshot#3: Novena etapa Briançon-Mónaco 239 km
Nos encontramos con Col de Vars y, el renombrado en los últimos tiempos, La Bonette Restefond, 2800 metros de altitud, y esa altitud, por sí sola, ya hace pupa. El problema es que los puertos están muy lejos de meta, concretamente Restefond está a 141 km y las ventajas obtenidas en su cima son fácilmente salvables. La llegada es en el velódromo y gana al sprint Poulidor… solo que aún falta una vuelta más, se ha equivocado y acaba ganando Anquetil, que encima obtiene una bonificación de 1 minuto (aviso, spoiler: Anquetil acabará ganando este, su quinto Tour, por 55 segundos).

Anquetil 1 Bahamontes 1 Jiménez 1 Poulidor -1
Snapshot#4: Etapa décima segundo sector CRI 21 km
Volvemos con la fórmula de doble sector (¡pero qué caray desayunaban esta gente!). Primer sector de 187,5 km y segundo sector de 21 km CRI. Nada que explicar, Anquetil, como es normal.
Anquetil 2 Bahamontes 1 Jiménez 1 Poulidor 0 (seamos píos)
Snapshot#5: Decimotercera etapa Perpignan-Andorra 170 km
El día 4 de julio de 1964 llega por primera vez al Principado el Tour de Francia. Proviene de Perpiñán con una etapa de 170 km en la cual se afrontan los puertos de Col de la Perche (2ª), Puymorens y Envalira por el lado francés. Puertos nada dificultosos, pero pestosos a más no poder. No es raro dejarse una minutada en ellos. Se impone de manera magistral Julio Jiménez, el relojero de Ávila. Julio gana la etapa con ocho minutos y medio sobre el pelotón. La clasificación está muy ajustada y el líder Groussard, Anquetil y Poulidor están en un intervalo de menos de dos minutos. La exhibición de Jiménez le aúpa hasta el octavo puesto de la clasificación general.
Anquetil 2 Bahamontes 1 Jiménez 2 Poulidor 0
Snapshot#6: Día de descanso en Andorra
Sí, amigos, sí, en este Tour hasta el día de descanso es importante. Y aquí aparece la magia que tanto dicen afectó al desarrollo de este Tour. En 1964 la leyenda no fue estrictamente deportiva, sino más bien fundada en los chascarrillos que se crearon en torno al desfallecimiento del favorito Anquetil en el puerto andorrano al día siguiente (como me gusta hacer spoilers). En su primera visita a Andorra, la organización ya incluyó el modelo que se ha utilizado habitualmente, en tres de las seis ocasiones en que han acudido al pequeño Principado. Se incluye una etapa con llegada en Andorra (habitualmente montañosa y larga), una jornada de descanso y una jornada montañosa con salida en el país.
Seguramente la leyenda negra de los días de descanso en grandes vueltas tenga uno de sus episodios de máximo esplendor, y tal vez su origen, en esta primera visita andorrana. Se dice que un “mago” llamado Bellini, que tenía cierta notoriedad en Francia, hizo una predicción de que en la etapa 14ª, un ciclista cuyo nombre empezaba por A iba a morir en el descenso de un puerto. Anquetil, parece ser, que se lo tomó muy a pecho y cogió miedo y decidió aprovechar el día que le quedaba. La mayoría de ciclistas optan por un rodaje tranquilo, pero Anquetil asiste a una fiesta organizada en la muy conocida sede de Radio Andorra en Encamp. En la fiesta se reparte sangría por centenares de litros (más de 200, dicen las crónicas de la época) y se sirve cordero asado. La pequeña historia dice, en Andorra, que la fiesta no terminó allí, sino que continuó con cortejos femeninos hasta bien entrada la noche. Las fotos de Anquetil comiendo una pata de cordero y con numerosas mujeres son más que conocidas. Pero amigos… los excesos se pagan.
Snapshot#7: Decimocuarta etapa Andorra-Toulouse 186 km
El día pronosticado por Bellini, parece ser que Anquetil sale con el ánimo bajo cero. La subida del Port d’Envalira se cobra los excesos del día de descanso. Bahamontes y Jiménez parecen conocer la magnitud de la fiesta y deciden atacar, logrando una ventaja de cuatro minutos en la cima de Envalira. Aunque la etapa desde esa cima hasta Toulouse no presenta ninguna dificultad mayor, el estado de Anquetil preocupa y se teme por su descarte para la general final. Parece ser que las palabras de ánimo (o de reto, según algunas fuentes) de su director Géminiani y la ayuda de su coequipier Rostollan, empujándole incluso, logran recuperar la moral y las fuerzas de Anquetil, que finalmente logra recortar el tiempo perdido con un descenso suicida y envuelto en la niebla. Bahamontes siempre se quejó, argumentando que, aprovechando esta niebla de Envalira, se ayudó a Anquetil empujándole o subiéndole en coche. No se sabe a ciencia cierta la verdad de aquella etapa, pero los viejos de Andorra siempre explican la fiesta, incluyendo también las correrías nocturnas.
Pero ahí no queda todo (creo que Bellini a partir de aquí se quedó sin trabajo). Resulta que Poulidor pincha y, entre su mecánico y él, no se ponen de acuerdo. Se caen incluso los dos por empujones mutuos y finalmente pierde dos minutos y medio en meta. Anquetil no solo no pierde la vida, sino que encima encarrila muy bien la victoria en el Tour.
Anquetil 2 Bahamontes 1 Jiménez 2 Poulidor -1. Bellini acabado
Snapshot#8: Decimoquinta etapa Toulouse-Luchon 203 km
La etapa, con 203 km, afronta Portet d’Aspet, Ares y Portillon, la cima de este último a 10 km de meta, transitando brevemente por España. La raza, la tozudez, el honor, llámenlo como quieran, pero de eso Poulidor anda sobrado. Gana en Luchon, pero sin el suficiente tiempo como para arrebatar el liderato a Groussard. Nunca logrará catar el maillot amarillo.
Anquetil 2 Bahamontes 1 Jiménez 2 Poulidor 1 (¡por fin!)
Snapshot#9: Decimosexta etapa Luchon-Pau 197 km
Esta es la etapa buena, para quien esto escribe, la etapa reina de este Tour. Por delante, Peyresourde, Aspin, Tourmalet, Soulor y Aubisque, la cima de este último a 57 km de meta. Y el protagonismo es para otro que además de tener las cualidades de Raymond, las adereza con un toque de genio, genialidad y, sobre todo, egolatría (chulería castiza vamos, aunque sea de Toledo). Bahamontes anda escapado y saca 6 minutos al resto en la cima del Aubisque. A 18 km de meta conserva 4 minutos, que vuelven a aumentar a 6 minutos a 11 km de Pau, pero el Dios Eolo no está por la labor de que Bahamontes repita historia en este Tour y sopla en contra. El pelotón de favoritos se organiza y este tozudo “solo al comando” finalmente obtiene casi dos minutos de ventaja sobre Anquetil y por unos segundos no puede arrebatar el maillot amarillo a Groussard.

Anquetil 2 Bahamontes 2 Jiménez 2 Poulidor 1
Snapshot#10: Decimoséptima etapa CRI 42 km
No hay mucha historia que explicar, Monsieur Chrono l’emporte, como era de esperar y coge un maillot amarillo (ojo spoiler otra vez) que ya no abandonará.
Anquetil 3 Bahamontes 2 Jiménez 2 Poulidor 1
Snapshot#11: Decimoctava etapa Brive-Puy de Dôme 237 km
Y llegamos al siempre caluroso y difícil Macizo Central, y afrontamos su máximo exponente: el Puy de Dôme. La pequeña historia dice que el director de Anquetil le había recordado por activa y por pasiva que fuese a reconocer la montaña, pero Raymond nunca lo hizo. Y como entonces montar un piñón de 23 se consideraba globero, decide seguir con su 21 tradicional: lo pagará. En esta etapa se fraguan dos leyendas del Tour. La primera (que está en proceso de formación) es que en la cima del Puy de Dôme se habla español, y la segunda a modo de documento gráfico: Poulidor y Anquetil mano a mano, mejor dicho, hombro a hombro, como queda reflejado en la instantánea histórica. Finalmente se lleva la etapa Jiménez, por unos segundos sobre Bahamontes y precediendo a Anquetil y Poulidor (¡si hubiese puesto ese 23!).
Anquetil 3 Bahamontes 2 Jiménez 3 Poulidor 1
Snapshot#12: Vigésimosegunda etapa segundo sector Versailles-Paris 37,5 km CRI
Tercera repetición en este Tour de la fórmula doble sector, y eso que nos encontramos en la última etapa. Como detalle de despedida de la organización, el primer sector es de “solo” 118 km. En la crono ya no vamos a detallar quién es el ganador, es una respuesta obvia y autocontenida (vamos, que Anquetil hoy en día no ganaba ni un Tour con los pocos km de crono que solemos tener).
Anquetil 4 Bahamontes 2 Jiménez 3 Poulidor 1
La clasificación final: Anquetil precede a Poulidor en 55 segundos (¡ay, esa bonificación de 1 minuto, esa pelea con su mecánico, ese 23 que nunca se montó!). El primero consigue su quinto Tour y el segundo se quedará sin subir ese peldaño que tanto merecía y sin vestir ese maillot amarillo que tuvo que regalarle su nieto. Pero para ser justos, Bahamontes también fue claro candidato a la victoria final; si en la etapa reina de los Pirineos hubiese colaborado más con Jiménez, tal vez… pero eso nunca lo sabremos.
El Tour 1964, el más icónico de la Historia. Todo lo que sucedió en ese 1964 fue genial. 😎

Xavier Palacios es más que un aficionado al ciclismo. Su pasión por la bicicleta le lleva a restaurar, cuidar el aspecto mecánico y haber ejercido como tal para algunos equipos. Desde su Andorra natal nos transmite sus opiniones sobre varias categorías del ciclismo: masculino, femenino, cicloturismo, historia…