Cuando ponemos el ¿Y sí? podemos liberarnos de las ataduras de la razón, la objetividad y los números, que fácilmente pueden desmontar nuestros sueños, pero, cualquier predicción a futuro puede ser válida, como en la película de los «Crímenes de Oxford», todas las series pueden ser completadas como nos guste, bueno alguna posibilidad, como que el autor que esto suscribe, pase a profesional del ciclismo, no es ni siquiera contemplable en los sueños más húmedos, pero algunos Espargarós más raros han caído.
Pues, hala ¡a soñar, que es gratis!
Remontémonos a un lejano 19 de septiembre de 2020 (no estuvo mal ese año con las grandes vueltas concentradas en su recta final), mi corazón sufría y se partía ante la visión de un, antaño, todopoderoso Roglic y su casco, que parecía uno de los hermanos Aragón en su circo televisivo. La piedad se apoderaba de mi y no pude soportar ver al esloveno viejo perder, con humillación, ante el esloveno joven.
Necesitaba un giro de acontecimientos y esperé pacientemente hasta el Giro 2023, en la crono del monte Lussari, donde, después de otro infarto Sramero (perfecto ejemplo el mono-plato americano de hacer de tu defecto virtud) Roglic reconquistó un poco de dignidad, aunque fue a costa de otro viejito, Geraint Thomas, sniff.
Viejito humilla viejito no me dejó tranquilo (se nota que quien esto firma joven no es – solidaridad generacional lo llaman- y también, para corroborarlo, hay que apuntar que el autor disfrutó con la victoria de Chris Horner en la Vuelta a España 2013) y gracias a la oportunidad de escribir este artículo podré aliviar ese dolor de corazón que aún dura desde el 2020, al menos en el terreno de lo probable y futurible, donde todas las hipótesis tienen una posibilidad de cumplirse.
Recordemos que el Tour 2025 tiene un recorrido con dos contrarrelojes (por empezar con lo que menos importa hoy en día), 7 etapas en llano, 6 de media montaña y 6 de montaña con cinco finales en alto.
También debemos recordar que, en principio, participará la “santísima” trinidad: Pogacar, Vingegaard y Evenepoel (por este orden), y que estando igual que en sus mejores momentos, el cuarto en discordia seria Roglic, pero en el próximo Tour tendrá casi 36 años, toda una incógnita su rendimiento con esa edad.
Empecemos analizando las contrarrelojes, la primera de ellas en Caen, completamente llana y con 33 km, Roglic no es manco en esta disciplina, pero claramente, en condiciones normales, el favorito es Remco. La segunda contrarreloj es en realidad una cronoescalada, 11 km de subida a Peyragudes, aquí ya podríamos dar una X en la quiniela, pero mejor no recordemos cronoescaladas infaustas de las bellas chicas.

Suponemos que las etapas llanas y de media montaña no son decisivas, si los respectivos equipos están bien, y Bora está cada vez más reforzado; además tenemos alguna etapa, como la séptima, acabando en Mur de Bretagne, que, a priori, puede hasta beneficiar a Primoz.
De las 6 etapas de montaña, tenemos cinco finalizando en alto: Hautacam, Super Bagneres, Mount Ventoux, Col de la Loze y la Plagne. Todas ellas con recorridos inferiores a 185 km y algunas mono-puerto (las tendencias de La Vuelta hacen mucho daño). La etapa, a priori más dura, es la que acaba en Col de la Loze, etapa octava, de 171 km y 5.500 metros de desnivel, pasando previamente por Glandon y la Madeleine. Todas las etapas de montaña, en condiciones normales, tienen a Pogacar y Vingegaard como favoritos, muy por encima de los demás.
Teniendo en cuenta este recorrido, ¿qué debe suceder para que Roglic gane el Tour 2025? Teniendo en cuenta que el recorrido no le es estrictamente contrario, el primer escollo de más bajo nivel que debe superar es Evenepoel, este no tiene una gran contrarreloj para retrasar suficientemente a Roglic, por lo que batirlo es viable.
Otra cosa es el dueto Pogacar, Vingegaard, difíciles de batir en la montaña, puede ser que Jonas este cansado después de haber vencido en el Giro y que Tadej haya tenido una caída y no participe o se retire, en este caso Roglic es el siguiente favorito en la lista y… ¡la justicia divina habrá hecho su trabajo!

Xavier Palacios es más que un aficionado al ciclismo. Su pasión por la bicicleta le lleva a restaurar, cuidar el aspecto mecánico y haber ejercido como tal para algunos equipos. Desde su Andorra natal nos transmite sus opiniones sobre varias categorías del ciclismo: masculino, femenino, cicloturismo, historia…
A ver si es verdad y la justicia divina equilibra!!!! 💪