Con una peculiar historia y a base de trabajo y esfuerzo, el nuevo corredor de Caja Rural, Gorka Sorarrain, ha conseguido alcanzar el ciclismo profesional con 28 años.
Sevilla la Nueva, Campeonato de España 2023. Oier Lazkano se sabe campeón y disfruta de las últimas rampas de la jornada tras una espectacular cabalgada. Por detrás, figuras como Aramburu, Ayuso o Ion Izaguirre pelean por las medallas. Entonces, una estela amarilla les sobrepasa por la derecha, comienza a bailar su bicicleta y no mira hacia atrás, no tiene miedo a plantarle cara a las grandes figuras del pelotón español
¿Pero quién es este chico? -pensaría alguno de ellos-. Pues ese chico es Gorka Sorarrain, quien finalmente es sobrepasado por las primeras unidades del grupo y finaliza quinto. Un quinto puesto que sabe a gloria. Y es que, él no lo sabe todavía, pero ese quinto lugar va a hacer que su vida dé un giro de 180º.
- Para el que no le conozca ¿Quién es Gorka?
GS: Pues es una historia peculiar, vengo un poco de la nada. Empecé a coger la bici después de terminar mis estudios y comencé como cicloturista, pero con la llegada de la pandemia me enganché a esto y fui tomándomelo más en serio, hasta que en 2022 decidí comenzar a competir. Me considero un ciclista bastante potente, que se defiende en la media montaña y que tiene un buen final.
- ¿Siempre le ha gustado practicar deporte?
GS: Sí, desde pequeño. Siempre me ha gustado el ciclismo, pero nunca había tenido la oportunidad de practicarlo. En casa nadie practicaba y no teníamos cultura de ciclismo. No obstante, comencé haciendo un montón de deportes y finalmente me decidí por el baloncesto porque al final también tenía más amigos que jugaban. Más adelante, también comencé a correr, incluso hice alguna Behobia. Notaba que tenía buen nivel para no hacer grandes entrenamientos. En su momento, incluso me planteé hacer triatlón, ya que amigos lo hacían y era extraño que alguien comenzase en el ciclismo de la “nada”. Entonces, llegó la pandemia y me compré un rodillo.
- En la pandemia, ¿solía seguir un entrenamiento o iba a su rollo?
GS: Al principio jugaba con algún amigo en Zwift y luego comencé a hacer entrenamientos sueltos sacados de internet, pero sin nada específico. Más adelante, cuando se pudo salir y me compré el potenciómetro, me dí cuenta que movía bastantes más vatios. En el rodillo algún amigo me ganaba y luego cuando salíamos a la calle siempre quedaba por delante.
- Su primer equipo fue Cafés Baqué, cuénteme un poco como llega esa llamada.
GS: Bueno, en las marchas en las que participaba solía quedar delante y también tenía el gusanillo de la competición. Al final le eché valor y decidí empezar a competir en el 2022. Entonces ahí decidí coger entrenador. Al final era novato y necesitaba que alguien me guiara. Al principio, sin experiencia, no tenía oportunidad de apuntarme a ningún equipo y desde el club de Tolosa me recomendaron empezar como independiente. Desde las primeras carreras, comencé a quedar en el grupo delantero y al mes y medio me llamaron de Cafés Baqué.
- ¿Notó grandes cambios en la planificación tras su fichaje?
GS: La verdad que era parecido, seguí con el mismo entrenador. En cuanto al equipo, desde que entré empecé a disputar y me ayudaban en ello. Así que también fue un salto, me ayudó en muchas cosas. Al final en un equipo cada uno tiene su rol y se plantea mucho mejor la carrera. Fue otro paso que me ayudó a seguir aprendiendo.
- El fichaje por Bai Sicasal supone un nuevo paso adelante en su carrera. ¿Aquí se comienza a plantear que puede llegar al profesionalismo?
GS: Al final de temporada del año pasado terminé con muy buenas sensaciones. Entonces, ahí vi que podía tener alguna oportunidad. Los Pro Team de España no tenían mucha confianza en mí porque solo llevaba una temporada y tenía 26 años. Cuando me llamaron de Bai Sicasal tuve bastantes dudas porque trabajaba y tendría que ir a Portugal a competir. El equipo tenía licencia angoleña y las condiciones daban para cubrir los gastos de manera muy justa. Sin embargo, finalmente acepté ya que en el calendario amateur no podía seguir compitiendo por temas de edad y no quería dejarlo ahí.
- Todo ello, trabajando al mismo tiempo ¿Cómo hacía para compaginar ambas cosas?
GS: Este año ha sido más complicado, el nivel era mayor y quería entrenar más. Mi rutina diaria era trabajar de 7:30 a 16:00 y cuando terminaba aprovechaba para entrenar. En invierno a las 17:30 ya es de noche, entonces salía con un foco grande delante y otro detrás. Cerca de casa tengo una carretera en la que no hay mucho tráfico y está bastante bien. Luego aprovechaba los fines de semana para meter volumen. Para competir, pedía fiesta y cogía un vuelo los jueves, no he tenido muchos días de competición, unos veintitrés, entonces lo he podido compaginar bien. Eso sí, he gastado todos los días libres que tenía.
- Un antes y un después fue ese campeonato de España. ¿Lo tenía anotado cómo un gran objetivo?
GS: Sabía que podía hacerlo bien, pero no tanto. El recorrido me gustaba, era una carrera dura, con mucho desnivel acumulado y sin grandes rampas. De hecho, me puse como objetivo la contrarreloj porque nunca había preparado una crono para hacerla bien. Sin embargo, en el momento de la carrera, me salió un día muy malo, hacía mucho calor y sufrí un montón. En la ruta, sabía que era una carrera de eliminación. La planificación era ir guardando y al final intentar jugar mis cartas si llegaba en el grupo.
- ¿Fue con alguien del staff del equipo?
GS: Del equipo fuimos tres corredores, pero no vino nadie del staff. Cada uno fue con su familia y en mi caso fueron ellos los que se encargaban del avituallamiento, me daban hielo y agua, lo que necesitara. Yo les decía dónde se tenían que colocar y me estuvieron siguiendo toda la carrera. Así que ellos fueron mi equipo, mis padres y mi novia.
- Más bonito aún ¿no? Ellos también forman parte de esa victoria.
GS: Si si, tampoco teníamos coche ni nada e íbamos sin pinganillo. De hecho, al final no sabía que Lazkano iba por delante y cuando ataqué a falta de un kilómetro pensaba que iba cabeza de carrera.
- ¿Qué espera de esta nueva etapa en Caja Rural?
GS: Pues de momento no he hablado nada en concreto con el equipo, pero ahora espero andar en la lucha por etapas.
- A nivel personal, ¿tiene algún objetivo en especial?
GS: Tengo el objetivo de seguir disfrutando, empecé como un hobby y se ha convertido en profesión, entonces quiero saber hasta dónde puedo llegar. Por ahora no tengo metas fijas, con el paso del tiempo ya pondremos.
Foto: Team Caja Rural – Seguros RGA
El riojano Sergio Quintana es una joven promesa del periodismo ciclista español. Además de escribir artículos sobre ciclismo profesional para High-Cycling y ahora para Le Puncheur, se encarga de dirigir el programa de YouTube.
