Reflexiones: Giro y Vuelta para Nairo Quintana en 2024 (Movistar)

El corredor colombiano Nairo Quintana tendrá sus mayores objetivos de la temporada 2024 en el Giro de Italia y en la Vuelta a España. Así se ha dado a conocer, dejando a Enric Mas la eterna responsabilidad de echarse a lomos la trayectoria de un equipo como el Movistar en una carrera que por cielo, mar y, sobre todo, tierra se ha encargado de mandar señales al corredor balear. Quintana afrontará una dupla inédita en su biografía durante una década. Fue en sus años de esplendor, cuando se vislumbraba como el gran rival de los todopoderosos Sky. Algunas voces afirman que ser segundo en el Tour obliga al ciclista a presentarse año tras año en la ronda gala hasta ganarla.

En Movistar pensaron que era la última oportunidad de completar el palmarés de su entonces joven pupilo, confiando en que las oportunidades en el Tour tardarían todavía en marchitar. Sea como fuere, en el Tour pasó lo que pasó y el colombiano dejó el listón tan alto que no sería capaz de superarlo, pese a los espejismos. Un #sueñoamarillo que acabó por vivir Egan Bernal, primer colombiano en lucir el maillot amarillo en París. Las casas de apuestas hubiesen pujado fuerte por Nairo unos años antes, pero el destino es así. Equivocado o no, el de Boyacá se llevó el gato al agua en aquel Giro de Italia de 2014. La Vuelta tiró literalmente sus sueños por tierra, cayendo duramente en el transcurso de la contrarreloj de Borja y teniendo que abandonar cuando iba de líder. Sabor agridulce.

En 2017 regresó al Giro, apuesta arriesgada que no le permitiría esta vez ni llevarse el rosa, batido in extremis por un intratable Tom Dumoulin, ni ser competitivo en el Tour de Francia. Desde entonces no ha vuelto. Ni con Movistar, donde priorizó el Tour y no le fue mal, con dos victorias de etapa en la más alta montaña (Col du Portet y Valloire), y la Vuelta, en la que también triunfó después de haberse llevado la general en 2016. Ni con Arkéa, con quienes centró el tiro más en el calendario francés y el Tour, siempre el Tour, que es la carrera que da y quita a todo aquel conjunto francés que se precie.

Después de unos meses finales de 2022 bastante turbulentos y un 2023 casi en blanco, la llegada a Movistar abre un hilo de esperanza para ambos. Una relación que se había roto, como revelaba el propio documental de la casa y que se ha cosido a base de necesidades mutuas. Enric Mas se encontraba demasiado solo en la palestra y tras la negativa de Carlos Rodríguez, culebrón que entretuvo las noticias relacionadas con Movistar durante los meses de verano, la llegada del veterano Nairo Quintana a la plantilla de los telefónicos irónicamente ha revitalizado muchas aspiraciones. A poco que el escalador colombiano conserve regularidad y buen hacer en las carreras de tres semanas, es una garantía para sumar los tan anhelados puntos que aseguren la permanencia en el World Tour.

El nivel del Giro debería ser menor que el del Tour. La confirmación de Tadej Pogačar en Italia ahuyentará a muchos, mejor para quienes pueden tener entre ceja y ceja el podio. Puede ser el caso de Nairo, que tiene buenas montañas en Italia ello. Eso sí, la contrarreloj también sube su dosis. Ya se ha visto a Quintana rodar con la cabra por tierras alicantinas. Será importante limitar pérdidas en ese terreno. Después, a disfrutar del mejor terreno para los escaladores. Sobre todo, dos etapas que se le adaptan a las mil maravillas: Livigno y Bassano del Grappa. Fondo, kilómetros de subida y altitud en el primero de los casos; el paso de los días en el segundo. No hay que olvidarse del Stelvio, que se desciende a mil de meta por el lado que le dio un Giro, no sin polémica, ante Rigoberto Urán.

Antes de llegar ahí, el terreno será accidentado. Pero hablamos de uno de los mejores en ese territorio, en aplicar la inteligencia a la marcha de un pelotón. Sobrevivir no es tarea fácil para un ciclista de pequeña talla entre percherones de patas largas y hombros eternos. Y él lo hace, obteniendo incluso renta de tiempo sobre otros rivales. Esa apariencia frágil, como la cara del niño que parece no haber roto ningún plato, oculta la de un ciclista que ha roto la baraja en multitud de ocasiones. Impecable, sin importar el terreno: abanicos, pavés, sterrato, fugas bidón… El historial de Nairo Quintana es dilatado en esas lides y merecerá un artículo más adelante.

Para llegar al Giro en condiciones óptimas, Movistar le alineará en pruebas de una semana de gran prestigio como Tour de Colombia, donde se dará un auténtico baño de masas, Volta Catalunya e Itzulia. Las dos últimas figuran en su excelso palmarés, que supera el medio centenar de victorias. Y, tras el Giro, la Vuelta a España. El recorrido montañoso de ésta le favorece. Aquí será importante ver el nivel aportado durante la temporada y la relación de fuerzas con Enric Mas, con quien aún no ha coincidido en una misma escuadra. El español recaló en Movistar en el momento en el que Nairo se marchó en dirección Arkéa.

En el mes de mayo debería coincidir con otro colombiano, Einer Rubio, recuperado para la causa en 2023. Más joven, viene a ser una de las grandes esperanzas de esta nueva hornada de talentos que el país americano pone en liza en 2024. Esa dupla puede funcionar, en espera de cómo se construyan las jerarquías. Movistar ha pecado en los últimos años de acumular cabezas de cartel que más tarde no han terminado de funcionar. Bicefalias y tricefalias de las que Nairo Quintana salió espantado tras la temporada 2019. La gota que colmó un vaso, cuenta la leyenda, bastante lleno por entonces. Uno tiene trayectoria, otro historia en el ciclismo. Veremos cómo se componen esas alineaciones primero y cómo se subordinan unos planes a otros. Si es que se subordinan, que a lo mejor se simultanean.

Mientras tanto, un plan trazado y una agenda que seguir. Si no media el infortunio ni los reveses inesperados, lo normal sería ver una buena versión de este ciclista. Tal cual le dejamos entre tanto terremoto a su alrededor. Y con un año en blanco que debería paliar sus efectos con el paso de los meses. Al fin y al cabo, Movistar ya vivió una situación similar en 2012 con el regreso de Alejandro Valverde tras aquella famosa sanción. Y no le fue mal al murciano, ¿no? Confiemos un camino similar para el astro colombiano en esta ocasión.

Fotos: Movistar / Sprint Cycling Agency