Una semana agridulce, pero con final feliz.
La Itzulia 2024 prometía ser una prueba muy abierta, con un recorrido diferente. No era el más duro, pero el cartel de favoritos prometía una pelea épica en la que, según lo previsto, todo se resolvería en la ya habitual etapa de Éibar. Así fue, la carrera se decidió en una última jornada en la que entre los veinte primeros de la clasificación general no había ni un minuto de diferencia. Sin embargo, aquellos que a priori iban a disputar la carrera, ya no se encontraban presentes. Las caídas acabaron con las opciones de Remco, Vingegaard y Roglic, mientras aquellos que lograron salvar el infortunio, trataron de reivindicarse ante la falta de grandes nombres que pudieran eclipsarlos.
Antes de que la carrera saltara por los aires durante la cuarta etapa, pudimos ver unas pequeñas pinceladas de lo que podría haber sido y no fue.
Primož Roglič, rayo de esperanza.
Tras pasar completamente desapercibido en París-Niza, el nivel en el que podríamos ver al esloveno en esta Vuelta al País Vasco comenzaba a generar cierto debate. Todas las dudas quedaron despejadas tras una crono magistral en la que, con una equivocación incluida, logró obtener la victoria con 7” de ventaja sobre Jay Vine (segundo clasificado) y 15 respecto a Jonas Vingegaard. En un principio, tras su primera caída en la tercera jornada, parecía que la mala suerte se volvía a cebar con él. Sin embargo, ha acabado siendo el mejor parado de los que tuvieron que retirarse tan solo un día más tarde.
Vingegaard y Remco, sin oportunidad de demostrar.
No hay mucho que decir de dos ciclistas que se marcharon sin haber podido demostrar para qué vinieron a esta Itzulia. Su buena actuación en la crono de Irún presagiaba una gran pelea, pero todos sabemos cómo acabó la historia. Toca esperar a que se recuperen lo antes posible.
Alex Aranburu, rozando la victoria.
El corredor de Movistar estuvo cerca de la victoria en tres ocasiones. Dos quintos puestos y un tercero. En las etapas clave estuvo en la pelea, ahora solo le hace falta cerrar el trato. Seguro que la recompensa terminará llegando. Además, cabe recordar que el guipuzcoano viene de recuperarse de una fractura de clavícula que lo tuvo sin tocar la bicicleta durante varias semanas.
Dura derrota para Skjelmose.
El danés se «encontró» con el maillot de líder tras la desgraciada caída de la cuarta etapa, pero finalmente no logró mantenerlo. Se tuvo que conformar con un tercer puesto que le sabrá a poco. Lo bueno es que el corredor de Lidl-Trek volvió a estar en la pelea por la clasificación general después de un Tour de Francia en el que quizás se pusieron las expectativas por encima de sus posibilidades.
Marc Soler, más que un gregario.
Una vez más, el catalán demostró unas piernas que no tienen nada que envidiar a las de los mejores corredores del pelotón. Atacó en Krabelin desde el grupo principal y logró conectar con una escapada que le sacaba más de tres minutos. UAE leyó la carrera a la perfección y Marc estuvo allí para responder a las órdenes de un equipo en el que es uno de sus grandes baluartes gracias a exhibiciones como la de ayer.
Juan Ayuso, gran vencedor.
La semana comenzó accidentada para el líder de UAE, pero finalmente ha terminado de la mejor manera posible. El español confesó en la sala de prensa que, por fin, ayer logró sentirse bien tras los dolores que ha tenido que soportar estos días debido a los golpes. Sin embargo, ayer la situación cambió y el de UAE logró rematar la estrategia de su equipo de la mejor manera. «Hoy me pude tomar la revancha con Skjelmose», comentaba tras la finalización de la etapa. El danés lo venció en la Vuelta a Suiza del año pasado, y ayer el español le devolvió la jugada con un ataque junto a Carlos Rodríguez que se recordará durante mucho tiempo entre la afición española.
Carlos Rodríguez, en busca de su mejor versión.
Van pasando los días de competición y parece que el sexitano comienza a encontrar ese punto de forma que le permitió luchar con los mejores en el pasado Tour de Francia. Ya avisó el pasado viernes cuando, en el último kilómetro, lanzó un ataque que puso en jaque al grupo que acabó disputando la etapa en Amorebieta. Ayer se reivindicó. No estaba siendo un inicio de año bueno para él, ni en lo deportivo ni en lo personal, pero finalmente Carlos alzó los brazos y señaló al cielo en una victoria que esperemos sea un punto de inflexión para el de Almuñécar.
Imágenes agencia EFE.
El riojano Sergio Quintana es una joven promesa del periodismo ciclista español. Además de escribir artículos sobre ciclismo profesional para High-Cycling y ahora para Le Puncheur, se encarga de dirigir el programa de YouTube.
Gracias Sergio:
Yo quisiera apuntar otra conclusión:
Queda demostrado tras la Itzulia que si los 4 equipos españoles PRO Tour quieren sobrevivir (para ellos su existencia a medio plazo es casi equivalente a poder participar/ ser invitado a la Vuelta y esto significa quedar entre los 30 primeros equipos del ranking UCI al final de 2025) tienen que seguir con su política de fichajes” exóticos” para puntuar en pruebas “exóticas y de segundo y tercer rango”.
Participar y despuntar ( y conseguir un buen puñado de puntos UCI) en una prueba WT como la Itzulia es para estos 4 equipos un objetivo casi imposible. Claro que para el desarrollo de sus ciclistas es bueno medirse a los mejores en pruebas WT pero en vistas de los puntos UCI tiene más sentido participar en el calendario francés de segundo rango tanto como en pruebas exóticas de tercer rango dentro y fuera de Europa.
Lo bueno es que se han dado cuenta. Ahora toca continuar esta estrategia y esto significa poner el foco en las pruebas donde hay muchos puntos en juego para ellos lo cual conlleva una planificación y un enfoque específico.
No les queda otra. Con la dificultad añadida que cada vez que uno de sus ciclistas despunte estarán los equipos WT al acecho para llevárselo. A ver lo que ocurre trás este 2024 con Orluis Aular…
Un saludo,
Paco Avila