Ha concluido una edición más del Tour de Francia y Tadej Pogacar no solo se alzó con la victoria, sino que logró una superioridad abrumadora frente a todos sus rivales, completando el doblete Giro-Tour, hazaña que no ocurría desde que Marco Pantani lo consiguiera en 1998.
En relación a los puntos UCI obtenidos, que nos servirán de métrica para determinar a los mejores equipos y corredores del reciente Tour de Francia, detallamos a continuación los resultados obtenidos:
A continuación, reseñamos lo mejor y lo peor de este Tour de Francia, sin un orden en particular:
LO MEJOR
UAE: Los ganadores de este Tour, y no podía ser menos ya que en el papel era el equipo a vencer. Con un Tadej Pogacar intratable, con la general, 6 etapas ganadas y con más de 3.600 puntos UCI por sí solo; Joao Almeida y Adam Yates consolidándose en el top 10 a pesar de ser los fieles escuderos del esloveno, y además, obteniendo la mejor clasificación por equipos, resultaron en un botín casi perfecto, que solo podía haberse mejorado si Pogacar no hubiera tenido problemas de hidratación que probablemente impactaron en su sprint reducido con Vingegaard en la etapa 11. Lograron 5.700 puntos UCI para seguirse consolidando como el mejor equipo de la temporada.
Visma: A pesar de llevar un equipo mucho más liviano que el año pasado, y haber sufrido la baja de Sepp Kuss a pocos días de iniciar la ronda gala, la actuación de Jonas Vingegaard fue descomunal, considerando que tras el accidente en Itzulia permaneció 12 días en UCI. Con 3.780 puntos UCI se consolidaron como el segundo mejor equipo del Tour, gracias en gran parte a la contribución del danés, quien también sumó una victoria, aunque el top 10 de Matteo Jorgenson en la general tampoco puede ser ignorado.
Soudal: Remco Evenepoel demostró que es un corredor de tres semanas. Gran animador y con un merecido podio, pese al retiro prematuro de Primoz Roglic. Una victoria de etapa y la camiseta de los jóvenes para Remco y un dignísimo quinto puesto de Mikel Landa Meana, que ha justificado plenamente su contratación, fueron los logros del cuadro belga, que también puede darse por servido con sus 2.945 puntos UCI.
Richard Carapaz: Con altibajos la primera semana, al convertirse en líder por un día y al día siguiente ceder un mundo de tiempo, encontró en el camino un nuevo objetivo por el cual pelear, y el ecuatoriano obtuvo una recompensa más que merecida: victoria de etapa para completar su trébol, maillot de puntos y premio al súpercombativo, el cual puede ser debatible hasta cierto punto. En todo caso, la Locomotora de Carchi ha justificado su presencia en el Tour y sigue haciendo historia para el ciclismo del Ecuador.
Jonas Abrahamsen: Gran animador en las primeras dos semanas, metiéndose a las fugas y completando más de 700 km escapado; además, fue el primer líder de la montaña y la peleó hasta donde le dio el gas. Para muchos, debió ser el supercombativo del Tour en detrimento de Carapaz, pero en favor del ecuatoriano, el del EF también estuvo escapado más de 700 km y obtuvo mejores resultados. Aun así, nada que reprochar al corredor del Uno-X, quien se lució en su primer Tour.
Binian Girmay: No era el favorito para llevarse el maillot verde, pero logró su reivindicación tras un retiro prematuro en el Giro. Tres victorias de etapa batiendo al favorito Philipsen, y con 33 puntos de ventaja en la clasificación de los puntos, lo convierte en uno de los mejores del Tour.
Jasper Philipsen: Perdió la verde frente a Girmay, pero fue un digno rival para el eritreo. También sumó tres triunfos de etapa y un par de segundos puestos, que le valieron 1.170 puntos UCI. Nada mal.
La número 35: Si algo le faltaba a Mark Cavendish para consolidar su posición como el mejor velocista de la historia (al menos para este servidor) era batir el récord de Eddy Merckx, y tras la salida prematura el año pasado, el “Manx Missile” obtuvo su recompensa. Si bien Cavs no hizo nada más en el Tour, más allá de completarlo (solo 210 puntos UCI producto de su victoria en la etapa 5), finalmente logró su objetivo en su última Grande Boucle. Los récords están para romperse.
LO PEOR
Groupama: David Gaudu, esperanza de Francia para lograr un resultado importante en el Tour, estuvo prácticamente desaparecido al punto que no sabemos si compitió. Lo único destacado fue la presencia de Romain Grégoire en varias fugas. El peor equipo del Tour con apenas 385 puntos UCI.
Astana: Más allá de lograr la número 35 para Cavendish, sus 420 puntos UCI (la mitad vino de la victoria de Cavs) son un claro indicativo de que no hicieron mayor cosa, previsible para una escuadra que llegó para proteger a su velocista. Lutsenko y Tejada algo hicieron, pero ambos muy lejos de su rendimiento ideal.
Arkea: Aunque tuvo los deberes hechos con la victoria de Kevin Vauquelin en la etapa 2, fuera de eso no hicieron mucho. Se esperaba más de Démare y Mozzato, pero el primero nunca estuvo cerca de ganar y se fue prematuramente por llegar fuera de tiempo, mientras que el segundo estuvo prácticamente desaparecido. Solo consiguieron 505 puntos UCI.
INEOS y Decathlon: ¿En qué se parecen estos dos cuadros? En que llegaron con grandes expectativas al ser dos de los cinco mejores equipos de la temporada previo al Tour, y con equipos armados para, al menos, ganar una etapa; sin embargo, se fueron con las manos vacías, y no estuvieron ni siquiera cerca de conseguirlo, salvo el tercer puesto de Kwiato en una fuga. Bernal y Thomas por INEOS, y Bennett y Lapeira por Decathlon, fueron de las grandes decepciones para estos cuadros.
Arnaud De Lie: Si miramos los resultados, en frío, con 450 puntos UCI diríamos que no le fue tan mal; sin embargo, se esperaba mucho más del campeón belga, quien en varias etapas demostró tener las piernas para ganar una etapa, pero que pagó demasiado caro su pésima colocación en los embalajes. Esto es algo en lo que De Lie debe mejorar si quiere estar al nivel de los mejores.
Desaparecidos: Hay un largo listado de corredores que prácticamente pasaron inadvertidos en esta carrera y que apenas obtuvieron puntos UCI (aunque en algunos casos, ninguno); sin embargo, se esperaba algo más en algunos casos, ya sea en los sprints como en las fugas, a tal punto que varios fanáticos ni siquiera se enteraron de que habían estado compitiendo en la carrera (e incluso la culminaron). Aquí citamos a: Van der Poel (apenas un lanzamiento a Philipsen), Mohoric (absolutamente nada), Jakobsen (solo un par de top 10 para el otrora mejor velocista) y Formolo (desaparecido por completo, ni ayudó ni se fugó).
Juan Ayuso: Podría haberlo puesto en los desaparecidos, pero el corredor español merecía un capítulo aparte al ser el único punto bajo dentro de la perfección que mostró el UAE en este Tour. Una nula contribución, tirando apenas unos metros luego del reclamo airado de Joao Almeida, y una presencia bastante cuestionable casi siempre a cola de pelotón no ayudaron a la causa primordial del equipo. A su favor, se retiró prematuramente por Covid, y quizás eso pudo afectar.
Top 8: Pogacar, Vingegaard, Evenepoel, Carapaz, Girmay, Philipsen, Almeida y Abrahamsen.
Menciones honoríficas: Landa, Turgis
No-Top 8: Gaudu, Bernal, Van der Poel, Formolo, Mohoric, Demare, Ayuso, De Lie.
Ricardo Rendón escribe desde Ecuador, desde donde transmite análisis sosegados, visiones del ciclismo muy interesantes. Es, además, el gran motor del recuento de puntos UCI, de tanta actualidad para los equipos World Tour y Pro Teams. Una pieza clave del proyecto Le Puncheur que hereda de High-Cycling.