Las fugas en Galicia dan «calidade» a La Vuelta a España

La Vuelta llegaba a Galicia esta semana, donde hemos presenciado tres días algo más tranquilos en cuanto a la clasificación general. Sin embargo, esto no significa que las etapas hayan sido aburridas, especialmente por lo difícil que fue formar las fugas y porque estas han tenido éxito en los tres días.

En primer lugar, la Vuelta llegó a Baiona y allí cinco corredores lograron escaparse, entre los cuales se impuso cómodamente Wout Van Aert. El belga es, hasta la fecha, el hombre de esta edición de la ronda española, con tres victorias de todos los colores ya en su haber. Además, sigue portando el maillot verde, que debería llevarse salvo que ocurra algo inesperado.

Unipublic/Cxcling/Naike Ereñozaga

A continuación, tuvimos la etapa de los dos pelotones, con llegada al Campus Tecnológico Cortizo, en Padrón. En esta ocasión, se formó en cabeza un grupo que bien podría haber sido otro pelotón. Hasta 39 corredores hicieron parte de esta fuga, en la cual resultó vencedor Eddie Dunbar, con un ataque sorpresa al más puro estilo Óscar Freire en Verona.

El líder, O’Connor, acabaría cediendo en la última ascensión, gracias al empuje del equipo de los tres nombres: Red Bull – Bora – Hansgrohe, que lanzaron a Primoz Roglic, al que solo pudo seguir Enric Mas. O’Connor y su equipo, Decathlon AG2R, fueron además protagonistas de esta etapa por partida doble, tras recibir una sanción por bloquear la carretera para evitar ataques de sus rivales.

La última de las etapas trajo la primera victoria española de esta Vuelta. Pablo Castrillo inauguró el marcador y dio también la primera victoria a Kern Pharma en su segunda participación en una gran vuelta. El mejor homenaje posible para uno de sus principales promotores, Manolo Azcona, quien falleció justo horas antes.

Unipublic/Cxcling/Jose Carlos Diaz

El valiente corredor de Jaca lanzó un ataque seco a 10 km de la meta, en la cima de la estación de Manzaneda. Solo Mauro Schmid intentó seguirlo, pero no fue capaz de acercarse a él. Finalmente, Castrillo llegó solo, unos segundos por delante del resto de los fugados, en un final agónico pero muy emocionante para el mundo del ciclismo. A la cuarta fue la vencida, como dijo el propio corredor en meta, que no ha dejado de intentarlo en estas primeras 12 etapas.

A partir de este viernes, vienen etapas decisivas, comenzando con la subida a Ancares, que podría dar un nuevo vuelco a la clasificación.