Este 6 de mayo de 2025, Caleb Ewan ha decidido bajarse de la bicicleta definitivamente, esta vez, para no volver. Con solo 30 años, el velocista australiano sentía que era el momento para poner punto y final a su carrera y dice adiós al pelotón después de años repletos de victorias y alguna que otra dolorosa derrota, pero con más luces que sombras.
It’s been a wild ride.
Until next time,
Caleb pic.twitter.com/9aRymemkKm
— Caleb Ewan (@CalebEwan) May 6, 2025
El de Sydney deja entrever que ya no era tan feliz y que ni siquiera cruzar la meta y levantar los brazos le resultaba satisfactorio como podía pasarle hace años. A la vez, se muestra agradecido al ciclismo, a sus equipos y satisfecho con su trayectoria y palmarés.
Además, hace mención a sus últimos años, los cuales no fueron fáciles. Ewan venía de dos temporadas duras, con resultados que no reflejaban la potencia que siempre demostró. Muchos pensaban que su mejor versión ya había quedado atrás. Pero entonces llegó INEOS en la que parecía una última oportunidad. Ewan recogió el guante y, lejos de rendirse, lo agarró con fuerza y volvió a ganar.
Volvió a levantar los brazos en la Semana Coppi e Bartali y en la Itzulia, demostrando al mundo que todavía estaba «vivo». Pero su experiencia con los ingleses solo duró unas semanas, pues hoy ha anunciado oficialmente que cuelga la bicicleta.
Ewan comenzó a brillar muy joven, destacando desde las categorías inferiores por su potencia y estilo único. Su explosividad lo llevó a convertirse rápidamente en una de las ruedas a seguir, (que no adelantar), en los sprints masivos.
Debutó en el WorldTour con el equipo Orica-GreenEDGE, pero fue con Lotto Soudal donde vivió sus mejores años, conquistando etapas en el Tour de Francia (5), el Giro de Italia (5) y la Vuelta a España (1).
A lo largo de su carrera, sumó, contando las 2 de este 2025, un total de 65 victorias como profesional. Algunas fueron espectaculares, ganando al límite o mediante el «VAR» del ciclismo, la «foto finish». Otras, con autoridad. Pero siempre con esa característica postura agachada sobre la bicicleta, casi metiéndose en el manillar, como si fuese una bala. Esa forma de sprintar le hizo conectar con los aficionados y ganarse el apodo de «Pocket Rocket»
El ciclismo pierde a un ciclista que durante unos años fue un gran «pasista». Característica esta que estuvo a punto de darle dos monumentos en los que dió al palo. En Milán – San Remo estuvo apunto de lograrlo, pero Nibali en 2018 y Stuyven en 2021 le quitaron el ansiado monumento.
Y así, habiendo demostrado en Itzulia que aún tenía velocidad en las piernas y fuego en su interior Caleb elogió acabar aquí. Se demostró a si mismo que seguía siendo rápido, cerró unas cuantas bocas y dio por concluida su aventura.
Se va sin hacer mucho ruido, pero con un palmarés absolutamente envidiable y habiéndose ganado el respeto de compañeros y rivales. En su nueva vida le acompañará el cariño y admiración de quienes lo vieron competir, luchar, ganar y volver a intentarlo.
Gracias por el espectáculo, Caleb. Y suerte en lo que venga.
Alberto aterriza en Le Puncheur por elección propia después de haber dirigido durante 6 años otro proyecto relacionado con el atletismo. Deportivamente dedicado a la marcha atlética, pero apasionado de ciclismo desde que tiene uso de razón, este Toledano viene a darnos su punto de vista siempre desde el lado mas objetivo posible.
