Nueva actualización del calendario nacional júnior y sub-23. Repasamos lo más destacado de las últimas semanas en la Copa de España y el Torneo Euskaldun, con resultados, protagonistas y evolución de la general. Puedes consultar la anterior crónica del inicio de temporada también en nuestra web.
Repaso del calendario sub23 español
Clásica de Torredonjimeno
Arrancaba la Clásica de Torredonjimeno y todo el pelotón tenía la mirada puesta en el encadenado montañoso de Locubín (1ª Cat.) y Valdepeñas (2ª Cat.), puntos calientes de la jornada. Hasta el primer puerto no hubo realmente una fuga consolidada, pues hubo un gran control de los equipos más fuertes y nadie quería dejar ir a ningún outsider. Llegaban las primeras rampas de Locubín y rápidamente se seleccionaba el pelotón que comandaba el Cortizo, que conseguía dejar el grupo en unas 30 unidades al coronar. Alejandro Granados lanzaba un ataque coronando y conseguía unos metros sobre el grupo, que conseguían cerrarle los componentes del equipo gallego.
Empezaba el puerto más duro de la jornada y se sucedían los ataques que, poco a poco, iban seleccionando el grupo hasta que se quedaban Granados, Solhaug, Crozzolo y Rey en cabeza de carrera coronando. Tras un gran trabajo de Unai Ramos, el grupo trasero de unas 15 unidades daba caza a las 4 unidades delanteras. A partir de aquí, el Cortizo contaba con 4 corredores en un grupo de 20 y realmente solo tuvo una amenaza real en la figura de Granados, quien, cada vez que había una pequeña subida, los ponía a todos en aprietos. Finalmente, era Bilyi quien conseguía irse para alzar los brazos en meta; Solhaug fue segundo y Cepa, tercero.
Copa de España Valladolid
Llegaba la Copa de España a Valladolid con una carrera de 155 kilómetros que históricamente se había resuelto en un esprint numeroso.
Se daba la salida, y en el km 5, en un duro repecho, se hacía la fuga del día con grandes favoritos en ella. La fuga contaba con 17 integrantes, 3 de ellos corredores del Cortizo y 2 del Finisher. En ella no estaban ni José María Martín (Extremadura Pebetero) ni César Pérez (Finisher), líderes de la general, ni ningún corredor del Caja Rural-Alea, por lo que el Padronés seguía marcando el ritmo en cabeza con el objetivo de que la escapada llegase a buen puerto, evitar un esprint masivo en el final de la capital vallisoletana y, al mismo tiempo, buscar que los líderes sumasen el menor número de puntos posibles. La diferencia, que llegó a superar los 3 minutos, se reducía al minuto y medio en el último paso por El Portillo. El Cortizo priorizó que todos sus corredores consiguieran un gran botín para la clasificación de la Copa de España, posibilitando que alguno de sus compañeros de fuga les arrebatase la victoria. Finalmente, Albert Roca (MP Group) fue el más rápido en el esprint reducido, Solhaug (Cortizo) fue segundo, y Martín Rey (Cortizo), tercero.
Se puede sacar una interesante reflexión acerca de cómo un equipo como el Caja Rural, prácticamente tan fuerte como el equipo gallego y ayudado por otras formaciones, no fuese capaz de dar caza al grupo cabecero; un poco como aquel Quick-Step de la época de Sagan, que cuando se les iba la carrera, al ser su superioridad numérica su gran fortaleza, no eran capaces de trabajar para un líder sacrificando sus opciones.

Santikutz Klasika
Un año más, la Santikutz Klasika volvió a demostrar su dureza, con un recorrido rompepiernas de 152 kilómetros en el que se intercalaban constantes subidas y bajadas, carreteras estrechas y mucho público, que hacen de esta carrera una de las más atractivas del calendario.
Se hacía una fuga al poco de salir en la que estaban Marcos Gómez (Maglia), Mika Vijfvinkel (Essax) y Oier Muñiz (Eiser), y era el corredor del Essax el último sobreviviente, quien finalmente era neutralizado a 60 km de meta. Mientras tanto, por detrás perseguían en un gran grupo José María Martín y César Pérez, que se habían visto cortados junto con otros muchos corredores en diversas montoneras.
En el primer paso de Aztiria arrancaba uno de los favoritos, Jesse Maris. De este modo, se abría la carrera y se sucedían una serie de movimientos de distintos corredores que no llegaban a consolidarse, y no fue hasta antes de llegar a Legazpi que se consolidó una fuga de 3 unidades: Alejandro Granados, Iker Gómez y Juanpe Lozano, que eran cazados a poco de coronar Aztiria por un Crozzolo que imponía un ritmo fuertísimo que solo eran capaces de seguir unas 7 unidades.
Tras una larga bajada, Crozzolo volvía a arrancar en Lierni y solo eran capaces de seguirle César Pérez, Iker Gómez y Solhaug, pero se reagrupaba todo en la bajada. A partir de aquí, Gómez se encomendaba en tareas para su compañero, líder de la Copa de España.
Llegaba la última subida del día, Gabiri, en la que, tras varios ataques, se volvía a seleccionar el grupo. Bajando volvían a entrar algunos corredores, como Iker Gómez, lo que favorecía la llegada al esprint, pues el Finisher quería una llegada al esprint. De este modo se resolvía la carrera, y alzaba los brazos Martín Rey, segundo César Pérez y tercero Pablo Lospitao.

Memorial Momparler
El Memorial Pascual Momparler 2025 volvió a ofrecer espectáculo puro en la Copa de España Élite-Sub23. En una jornada marcada por los ataques constantes y el doble paso por el Alto de Sumacàrcer, el desenlace llegó al sprint… y con sorpresa. César Pérez (Finisher) cruzaba la meta con los brazos en alto, confiado en su victoria, pero el que acabó levantando los brazos de verdad fue Samuel Fernández (Fundación Euskadi), que se impuso por milímetros en un final apretadísimo. Un “Erik Zabel” en toda regla.
La carrera, con 162 kilómetros y cinco vueltas a un exigente circuito con repechos y desgaste acumulado, mantuvo el suspense hasta el final. El grupo cabecero se formó en el tramo final con los ataques de Crozzolo, Pérez, Fernández y compañía, y se jugó el triunfo en los últimos metros. El podio lo completó el italiano Fabrizio Crozzolo, mientras que Warren y Crause firmaron la cuarta y quinta posición respectivamente.
Aunque se le escapó la victoria, César Pérez se consoló con el liderato de la general, en una Copa de España que sigue tan abierta como emocionante.
Repaso del calendario Júnior español
Vuelta a Tenerife
La Vuelta a Tenerife se resolvió en su segunda y definitiva jornada, con Pepe Vega (Electromercanti) defendiendo el liderato tras una primera etapa en la que logró casi un minuto de ventaja sobre el grupo perseguidor. La etapa decisiva, corta pero exigente, incluía el largo ascenso al Bailadero (más de 12 kilómetros) y un final en alto de 4 km. Desde la salida se impuso un ritmo feroz que deshizo el pelotón en las primeras rampas. En el tramo final del puerto, Iker Vélez aprovechó un momento de impás entre los favoritos para abrir hueco, coronar en solitario y consolidar su renta en la bajada. Sin embargo, en la subida final, tanto Vega como un corredor ruso lanzaron un ataque contundente, dieron caza a Vélez y se jugaron la etapa en un mano a mano que acabó resolviéndose a favor del ciclista del equipo Fores. Aun así, Vega se llevó la clasificación general.
Clásica de Amorebieta
Con su habitual trazado —40 km iniciales llanos y dos ascensos a Montecalvo—, la Clásica de Amorebieta congregó a una gran participación. La carrera se mantuvo controlada en las dos primeras vueltas, hasta que en los repechos previos al primer Montecalvo se rompió el pelotón y se formó un grupo con todos los favoritos. En la primera subida destacaron Ibai Villate y Javier Cubillas, quienes abrieron hueco. Por detrás, les seguían Eñaut Urkaregi, Unai Morán, Héctor Fernández y Ekhi Uriarte. En la segunda subida, por una vertiente más tendida, Villate se llevó el premio de la montaña. El ritmo bajó en el descenso hacia la meta, lo que permitió el reagrupamiento de Morán, Urkaregi y Uriarte. En el sprint final, Urkaregi se impuso con autoridad por delante de los dos corredores del equipo Alimco.

GP Baruco y Memorial Chele Campos
El Gran Premio Baruco y el Memorial Chele Campos, celebrados sábado y domingo respectivamente, reunieron a lo más destacado del pelotón júnior nacional y al potente conjunto británico Tofauti.
El sábado, en Baruco, el pelotón rodó a gran velocidad para evitar fugas. En la primera ascensión al Churi, Matthew Peace (Tofauti) impuso su ley con un ataque que solo pudieron seguir Iván Roure, Ekhi Uriarte e Iker Colmenero. Coronaron cazando al escapado del día. La lluvia apareció tras el paso por meta, endureciendo el escenario. En ese contexto, se formó un grupo selecto del que Peace volvió a saltar en solitario. A pesar de salir con apenas 20 segundos de renta, logró aumentar su ventaja hasta más de un minuto en meta, imponiéndose con autoridad por delante de Barceló, Uriarte, Torres y Roure.
El domingo, en el Memorial Chele Campos, el recorrido se repitió. Una fuga inicial de 10-15 corredores mantuvo diferencias controladas. En el primer paso por el Churi, Peace volvió a atacar, con Ibai Villate como único acompañante. Villate se llevó el premio de la montaña, pero el grupo se reagrupó bajando. Posteriormente, Héctor Fernández y Alex Coles se adelantaron antes de la segunda subida. Peace volvió a saltar, enlazó con cabeza y juntos abrieron un hueco de hasta tres minutos. Eñaut Bilbao intentó reducir diferencias, pero se mantuvo siempre a unos 30 segundos. En la última subida, Peace volvió a atacar con potencia para llevarse su segunda victoria del fin de semana. Fernández fue segundo, y Coles entró justo tras él.
Vuelta a los Valles Cántabros
Primera etapa:
La ronda cántabra arrancó con una etapa de 95 km quebrada en su inicio y con final en el puerto de Colombres. El ritmo inicial fue altísimo y se neutralizaron todos los intentos de escapada, excepto el de Jort Dockx, quien rodó en solitario durante 50 kilómetros hasta ser alcanzado. En la ascensión final, el grupo se redujo a 16 corredores. Javier Cubillas lanzó un ataque en uno de los últimos repechos y parecía encaminarse a la victoria, pero a 300 metros de la línea fue superado por Jasper Verbrugge, quien se impuso al sprint.
Segunda etapa:
Con un perfil más montañoso, la jornada incluía una subida final de 7 km, los últimos 4 al 7%. El pelotón rodó con cautela hasta la ascensión. El equipo Polti marcó un ritmo muy elevado, provocando cortes y desgaste. A falta de 4 km, Aitor Martínez lanzó un ataque demoledor. Solo el líder y Jaume Barceló pudieron seguirle, aunque el primero terminó cediendo. Martínez se marchó en solitario y cruzó la meta con 15 segundos sobre su compañero Barceló y 20 sobre Mario Cordero.
Tercera etapa:
La etapa reina, con 105 km y dos puertos de segunda categoría, estuvo marcada por la ofensiva desde la salida de equipos como MMR, Electromercantil y Baqué. El equipo del líder optó por conservar, una estrategia cuestionable en categoría júnior si no se dispone de una gran superioridad. Finalmente, se formó un grupo cabecero de 18 ciclistas con fuerte presencia de los equipos ofensivos. En las rampas del Soplao, coronaron en cabeza Torres, Martín Fernández y Pepe Vega. Aitor Martínez, en un intento desesperado, atacó desde el grupo del líder, pero sin éxito. Mario Cordero lanzó un contraataque antes de coronar, enlazando luego con tres corredores de la fuga para consolidar una diferencia de un minuto. En los repechos finales, Fernández y Torres intentaron marcharse, pero fueron alcanzados. Martín Fernández se impuso al sprint, mientras que Cordero, tras su gran maniobra táctica, se llevó la general. Pablo Osorio y Markel Aranaz, también presentes en la fuga, completaron el podio final.
Trofeo Euskaldun – Por Asier Ramos
El mes de abril en el Torneo Euskaldun ha tenido un color claramente verde: el del Caja Rural-Alea, que ha demostrado un dominio absoluto en las tres pruebas disputadas. El equipo filial de la entidad bancaria no solo ha logrado la victoria en cada carrera, sino que ha impuesto su ley con autoridad y una gran profundidad de plantilla.
La primera cita del mes fue la exigente carrera de Natxitua, un trazado sin grandes puertos, pero cargado de repechos que acumularon más de 2.100 metros de desnivel positivo en apenas 113 kilómetros. Según los datos de Unai Zurita, uno de los participantes, el recorrido rozó los 2.167 metros de desnivel, lo que da buena cuenta de su dureza. En este escenario, Juan Pedro Lozano logró una brillante victoria en solitario, por delante de dos compañeros de equipo, completando así un podio 100% Caja Rural-Alea. El dominio fue tal que colocaron a cinco corredores entre los diez primeros.

En Durana, la segunda prueba del mes, no hubo triplete, pero sí victoria para el conjunto navarro. En esta ocasión fue Adrià Regada quien levantó los brazos, imponiéndose en un sprint masivo de 27 corredores. El recorrido, de 134 kilómetros y 1.800 metros de desnivel, no logró romper la carrera a pesar de varios intentos, lo que beneficiaba claramente los intereses del Caja Rural-Alea, que buscaba precisamente ese desenlace al esprint.
La tercera y última carrera de abril se disputó en Lazkao, escenario tradicional del calendario vasco y una de esas citas marcadas en rojo para muchos corredores, con la subida a Lazkaomendi —en dos ocasiones— como gran juez del día. Allí, el Caja Rural-Alea volvió a imponer su poderío, y Juan Pedro Lozano repitió victoria, certificando así un mes impecable para el conjunto navarro en el Euskaldun.
En la general del torneo, el más regular ha sido Aimar Galdos, que sigue liderando gracias a una constancia admirable: ha puntuado en todas las carreras del torneo menos en una, y en abril firmó tres actuaciones destacadas (5.º, 3.º y 6.º). Aunque aún no ha conseguido alzar los brazos, su rendimiento merece sin duda una recompensa en forma de victoria. Le acompañan en el podio provisional Juan Pedro Lozano y Adrià Regada, los dos grandes protagonistas del Caja Rural-Alea en este tramo de temporada.
Estaba prevista una cuarta carrera para el 4 de mayo en Beasain, pero finalmente ha sido aplazada por motivos aún desconocidos.

Llegado desde Cantabria, Diego viene a Le Puncheur con el objetivo de brindar a los lectores su conocimiento de las categorías sub23 y junior, escribiendo sobre quiénes pueden ser los siguientes grandes corredores, siempre con un punto crítico y objetivo desde los datos