Con algo de calma antes de la “tormenta” que se avecina con la primera gran vuelta de este 2025, el Giro de Italia, vimos cómo el Astana fue noticia este domingo por haber obtenido un botín de casi 1.000 puntos (966 para ser exactos) solo ese día, producto de un doblete en la general de Turquía (con Poels y López) y otro más en la Famenne Ardenne Classic (con Kanter y Bol), además del cuarto puesto de Fortunato en la general de Romandía. Esta cantidad de puntos en un solo día solo es superable en un monumento o en el repatro de puntos de la general de una gran vuelta.
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Con esta gran renta, sumada a un deslucido mes de abril del Picnic y Cofidis, el cuadro kazajo ahora se sitúa a casi 152 puntos de la salvación, logrando ubicarse en el punto más cercano de una proeza que, a inicios de 2025, parecía imposible. De hecho, absolutamente nadie hubiera pensado que el Astana recortaría el 97 % de su déficit en apenas cuatro meses y antes de que se dispute la primera gran vuelta del año.
En resumen, lo que parecía imposible ahora parece que, de mantenerse el ímpetu, la tortilla puede darse vuelta en favor del Astana, que bien podría terminar la temporada en el puesto 17 y no en el 18. La renta del último fin de semana también lo ha situado, por primera vez, a menos de 600 puntos del Cofidis, que también corre peligro considerando que la otra escuadra que busca una licencia World Tour, el Uno-X, está a 2.110 de ellos. Por lo tanto, incluso podríamos tener dos descensos que lucían improbables hace escasos cuatro meses: Cofidis y Picnic.
¿Qué hizo bien el Astana?
Sin ánimo de ser xenófobo (no es la intención), uno de los grandes aciertos de la escuadra de Vinokúrov fue despojarse de tantos corredores kazajos que no aportaban gran cosa, salvo en los campeonatos de Asia. En su lugar, ha “italianizado” su escuadra, con siete adiciones entre las 14 altas que sumó este año, y aún dando la ventaja de mandar a Gleb Syritsa a la escuadra de desarrollo. Esto, sumado a la nueva asociación con XDS, ha hecho que sus X-Lab vuelen al nivel de lo que las Van Rysel del Decathlon lograron en 2024, y los resultados están a la vista.
Otro gran acierto en el Astana se dio en la forma en que ha encarado sus carreras, maximizando sus oportunidades en todos los niveles y enviando a los corredores a sacar puntos hasta de las piedras. En una edición anterior apuntábamos lo que aportó Mulubrhan corriendo para su país, pero también hemos visto el despertar del ecuatoriano López (que logró su primera victoria como profesional en Grecia), la gran primavera de Scaroni, Kanter sumando su primera victoria en mucho tiempo, además de las actuaciones dentro de lo esperado de corredores como Gate, Fortunato y Velasco. El aporte de todos ha sido tal que ninguno de sus corredores ha aportado más del 12 % de los puntos de la temporada (para ponerlo en contexto: en Alpecin, solo Van der Poel ha aportado el 50 % de los puntos de su equipo).
¿Qué hizo mal el Picnic–Post NL?
El extremo opuesto del Astana. Si bien su enfoque (no solo ahora, sino desde hace algunos años) se basa en promocionar a muchos corredores jóvenes arropados por algunos veteranos consolidados, no es menos cierto que sus corredores más experimentados no han tenido la mejor de las temporadas, como Degenkolb o Jakobsen, quienes incluso están fuera por lesión, situación que también ha mermado notablemente a esta escuadra.
Indistintamente de lo anterior, no se pueden justificar las malas decisiones que han tomado los del Picnic al momento de abordar sus carreras. Por ejemplo, enviar a dos velocistas de nivel a la misma carrera (como Andresen y Jakobsen), sin dividir las cargas en competencias distintas, incluso en las .1 (donde ni siquiera han podido sumar los 300 puntos). Si a esto le sumamos el retiro de Bardet en menos de 45 días, el futuro de esta escuadra es bastante incierto en la escena del World Tour, a menos que el francés se despida a lo grande con un top 5 y/o una victoria de etapa en el Giro.
Dicho esto, y tras analizar los startlists, es muy posible que el Picnic quede relegado a zona de descenso después del Giro, aunque no todo estará perdido para ellos, ya que anticipamos que la diferencia todavía sería alcanzable. No obstante, van a necesitar algo más que los puntos de Oscar Onley (quien ha aportado casi la tercera parte de los puntos del equipo esta temporada), o los destellos de Eekhoff y Andresen (quienes han conseguido las únicas dos victorias del equipo en 2025).
¿Y qué hay del Cofidis?
En el caso de la escuadra francesa, tras un lento inicio de año que la ponía en peligro respecto al Astana, en la primavera logró cierta mejoría, a tal punto que eventualmente superó al Picnic; sin embargo, siguen dependiendo de destellos de sus principales corredores: Fretin, Aranburu y Coquard han aportado el 50 % de los puntos del Cofidis esta temporada. Por eso, se espera más del resto, especialmente durante las carreras de mayor nivel. No se discute el hecho de que tienen el potencial de sumar una buena renta de puntos durante las clásicas francesas menores (han obtenido más puntos en carreras .1 que en las .Pro), pero necesitan algo más de sus corredores, así como mejores decisiones de su dirección deportiva. A juzgar por la escuadra que llevan al Giro, solo cuentan con verdadero potencial de sumar puntos UCI en las jornadas de velocidad, con Fretin y Allegaert.
En conclusión, se viene el Giro, y más allá de la expectativa natural que una carrera de tal magnitud puede generar, seguramente esta decidirá la suerte de los tres equipos analizados y sus posiciones respecto al descenso y la posible pérdida de la licencia World Tour, al menos para uno de ellos. Con los tres separados por menos de 700 puntos UCI, no debería sorprender a nadie si Astana supera al Cofidis y al Picnic luego de tres semanas, mientras que este último podría superar a la escuadra francesa si Poole y/o Bardet logran una buena general. Sin embargo, será una lástima ver al Uno-X ceder terreno aquí por no contar con invitación alguna, pero tampoco hay que perderlos de vista en los próximos meses si al menos dos de los tres equipos anteriormente mencionados salen mal parados del Giro.
Ricardo Rendón escribe desde Ecuador, desde donde transmite análisis sosegados, visiones del ciclismo muy interesantes. Es, además, el gran motor del recuento de puntos UCI, de tanta actualidad para los equipos World Tour y Pro Teams. Una pieza clave del proyecto Le Puncheur que hereda de High-Cycling.
Hola Ricardo:
Como siempre muchísimas gracias por tu fantástico análisis de como va la carrera
por la permanencia/ascenso a los 18 primeros puestos UCI lo cual garantiza acceso a todas las carreras importantes del próximo trienio. Menuda guerra les espera a los equipos involucrados….y nosotros a disfrutarla.
Hay otra guerra …..la guerra por el puesto 30….la que da acceso a ser invitados a las
GV’s en el 2026. Esta guerra la protagonizan los equipos Solution Tech, Unibet Tietema y el Euskaltel Euskadi. Ahora mismo están cerquita los 3 equipos (no se llevan más de 300 puntos) en cuanto a puntos. Creo que el momento adecuado para hacer un buen análisis es justo después de la mayoría de los campeonatos nacionales en Europa (a finales de junio). Nos puedes ofrecer por favor otro gran análisis por esa fecha y cuando quedarían poco más de 3 meses de competición?
Un millón de gracias por tus artículos y por mantener al día esa grandísima herramienta hecha en MS Power BI a la cual accedemos por la página principal de Le Puncheur.
Un saludo amigo,
Paco Avila