Este pasado fin de semana se disputó la 5ª prueba de la Copa del Mundo, esta vez en el renovado circuito de Crans Montana, situado en la comarca del Valais, cantón suizo que os animo a visitar. Mi hermano vivió allí varios años, así que os puedo hacer de guía. Ha habido cierta polémica con el circuito, ya que contenía un rock Garden clásico con una entrada bastante complicada y un «rock & wood» (palabra inventada para definir un rock Garden de maderas) que con lluvia se ponía interesante.
Es cierto que con las bicicletas actuales, los límites del XCO se están acercando bastante al DH y al gravity, con saltos y rock Gardens agresivos. Pero es que las bicicletas actuales hacen esto posible y, a mí personalmente, creo que no hacen la diferencia en las competiciones de la Copa del Mundo. Las diferencias ayer se hicieron en los tramos con raíces de subida y bajada.
En concreto, hay una bajada de Tom Pidcock en la segunda vuelta en la que la diferencia entre el británico y Nino Schurter o Mathias Flueckiger fue notable. Eso sí, lo que no es de recibo es que el recorrido se cambie el mismo fin de semana en base a las quejas de los corredores y corredoras. Lo mismo pasó en Brasil el año pasado y en Araxá este año. ¿No hay nadie que valide la seguridad de los circuitos cuando se presentan? ¿No están terminados con antelación? Personalmente, el circuito me pareció precioso y nos regaló dos bonitas carreras. Bueno, una bonita prueba femenina y 3 vueltas bonitas en la masculina. Si está Pidcock, las carreras no tienen mucha historia (y Van der Poel no tiene demasiadas ganas de volver al MTB).
En el párrafo anterior hice un spoiler, diciendo que la carrera femenina fue una pasada. Sí es cierto que faltaba Pauline Ferrand-Prevot, pero lo hubiera tenido difícil para ganar; ayer era territorio Lecomte y, en mi pronóstico, era la favorita independientemente de quién corriese. Tiene dos cualidades que hereda de dos de las más grandes, creo yo: suele llegar muy bien a las citas importantes, como Pauline Ferrand-Prevot, y cuando el día complica el circuito, suele brillar, como se vio el año pasado en Mont-Saint-Anne, como su admirada Jolanda Neff.
La carrera empezó con una start lap, en la que Lecomte quedó retrasada. No tengo muy claro cómo, pero de repente apareció en meta 13 segundos por delante de Pieterse, Keller, Courtney y Gibson. A partir de ahí, empezó una carrera totalmente nueva. Había secciones como los rock gardens y bajadas con raíces complicadas, tramos de hacer casi a pie. En nada se formó un terceto delante con Lecomte, Pieterse y Keller, en el que parecía que la holandesa era la más fuerte. Estaba en un terreno propicio para ella, ya que requería bajarse de la bicicleta, en lo cual se veía que era la mejor. En contraste, parecía que Lecomte había salido demasiado rápido (le suele pasar) y que iba hacia abajo, pero nada más lejos de la realidad: la francesa iba haciendo su camino, bajándose mucho menos de la bicicleta y sacando rendimiento en las partes complicadas.
Mediada la carrera, se quedaron delante Lecomte y Keller, de la cual insistieron mucho en la retransmisión diciendo que es una ciclista muy técnica. Confieso que yo no la tengo por una ciclista especialmente técnica, sobre todo comparada con Lecomte, y ayer la veía pasarlo mal en comparación con Lecomte. Esta, por el contrario, parecía que corría sola, haciendo todas las vueltas (excepto una) en menos de 15 minutos. Así que victoria para Loana Lecomte, seguida de Alexandra Keller y Puck Pieterse, que acabaron cediendo 46 segundos y 1 minuto y 30 segundos, respectivamente. Buenas noticias para el espectáculo que Lecomte esté ganando. Y como fan que me considero de Evie Richards, que volvía después de haberse recuperado de una conmoción cerebral, debo añadir que acabó en 5ª posición, nos alegramos por ella.
En la carrera masculina, la emoción duró «lo que duran dos peces de hielo en un whisky on the rock«. Dos vueltas en las que Pidcock iba tranquilo a su paso. ¿Se caía uno delante y perdía 10 puestos? Daba igual, en la siguiente curva hacía una trazada diferente o no se bajaba en sitios técnicos y ya estaba delante. Empezó comandando Charlie Aldridge, pero solo durante la start lap, para dejar paso a Julian Schelb, con Nino Schurter, Tom Pidcock y Maximilian Brandl persiguiéndole.
Parecía que Pidcock se iba a ir cuando quisiera, y así fue. En la segunda vuelta aceleró y Schurter le siguió hasta que explotó. La carrera se daba por sentenciada, pero como avisamos por Twitter, era un día indicado para Mathias Flückiger, que al igual que Loana Lecomte se crece en estas condiciones y le cerró casi 15 segundos de hueco a Tom Pidcock. Daba la sensación de que iba a alcanzarlo, pero al final no le fue posible. Aquí se acabó la carrera: se quedó a escasos 3 segundos y a partir de ahí el británico impuso su ritmo y amplió la ventaja.
La prueba se acercaba a su final con todo prácticamente resuelto, pero una caída de Nino Schurter le hizo perder la 3ª posición con Julian Schelb. Al final acabó luchando con el alemán y Luca Braidot, que a la postre fue el tercero, culminando en el podio su remontada. Viendo los tiempos de las vueltas, vemos que Pidcock se movía en vueltas que se iban a los 11 minutos y 37 segundos, mientras que el resto de competidores apenas eran capaces de bajar de 12 minutos. Otra liga, pero viendo la carrera y cómo bajaba, se encuentra la explicación. Muy bien Jofre Cullel, a quien debemos destacar, que acabó 14º pese a pinchar.
¡¡A por la siguiente en dos semanas en Les Gets!!
Loco de esto de las bicis desde los 5 años. Pantani, Ullrich, Euskaltel y Van der Poel me guiaron en mi camino… Amante de todo lo que tiene que ver con el offroad, ya sea pavés, CX o MTB. Cuando me propusieron colaborar con Sergio y Jorge en LePuncheur y cumplir mi sueño de escribir sobre ciclismo, no lo pensé, ¡no dejaría pasar esta oportunidad! Adicionalmente, también soy un paquete más compitiendo en Mountain Bike.
Muchas gracias y enhorabuena por la crónica.
Abro debate: ¿no deja en mal lugar al cross country, y a una leyenda como Nino Schurter, que casi cada vez que le da a Pidcock por pasarse por la copa del mundo, y sin centrarse exclusivamente en esta disciplina, le gane con tanta superioridad?