¿Qué está pasando en Ineos Grenadiers?

Mucha gente se pregunta qué estará pasando en casa del Ineos Grenadiers. ¿Que por qué? Pongámonos en situación. De la plantilla que está completando la temporada 2023 hay cuatro ciclistas que no empezarán la de 2024 luciendo los colores del equipo británico. No son precisamente bajas anecdóticas. Tao Geoghegan Hart, nacido en Londres para más datos, se marcha a Lidl Trek. La inyección del nuevo patrocinador, lo ilusionante de afrontar un proyecto en el que poder liderar en solitario, un cambio después de siete años en el mismo rincón del ciclismo. Motivos puede haber muchos, no hay duda. Posibilidades, también. Pero quedarse no estaba entre ellas. ¿Por qué? ¿No se le ha ofrecido renovar? ¿No ha aceptado hacerlo?

Caso Carlos Rodríguez, que aún parece no haber terminado. La película es inquietante, en este caso para las dos partes de un tejado a dos aguas que es esta margarita particular en la que se ha convertido el fichaje del joven ciclista español por el equipo español por excelencia. La oportunidad que le abría Movistar era clara para un ciclista que comenzaba a despuntar al máximo nivel en las filas del Ineos y que podía ver tapado su camino de crecimiento. No es nuevo el interés, el precontrato, los coqueteos al parecer consumados en una relación bilateral que tenía un plan claro y evidente, como tantos y tantos otros fichajes se gestan.

Ahí se abre un nuevo interrogante: ¿por qué Ineos no luchó de una forma más vehemente por renovar a una de las joyas más evidentes de su plantilla? Si lo hizo y no ha trascendido, ¿qué ha cambiado entre el inicio y el final del Tour? Porque antes de arrancar en Bilbao parecía que se daba al andaluz por perdido, o al menos es la sensación que se tenía desde fuera. Todo el mundo daba por hecho el fichaje de Carlos por Movistar. La piscina tenía agua desde hacía mucho, es vox populi.

Al finalizar el Tour se hizo pública la existencia del precontrato, un trámite común en el ciclismo profesional, que no permite la oficialidad de los contactos y los acuerdos previos al 1 de agosto. Y resulta que Ineos Grenadiers se encuentra en una pelea amistosa para resolver una situación compleja en el que de haber actuado antes la renovación de Carlos Rodríguez les hubiese salido bastante más barata, en cuestión monetaria y también en energías y tiempo empleado. La actuación del español en el Tour desbordó las predicciones y las expectativas, por lo que la negociación (lógicamente) será más costosa.

Ya no se trata de hablar con una promesa incierta, sino con una realidad que se ha visualizado al ganar una etapa a los todopoderosos Vingegaard y Pogačar. Las campanas al vuelo, y las cifras de la renovación, también. Aquí cabe otra posibilidad y es que la opción de Rodríguez no se tuviese encima de la mesa porque se contaba con realizar otro tipo de fichaje de mayor alcurnia. Véase Remco Evenepoel. Un fichaje que ha movido y moverá muchos ríos de tinta. Pero que parece que de una vez por todas se ha establecido en el coro del ‘no es no’ que inició Patrick Lefevere.

Parece evidente que Carlos no les llenaba como gran líder. Veremos en qué queda la recuperación de Bernal, si por fin consigue, como todos deseamos, que sea completa para que regrese el gran escalador que fue. Los mejores días de Geraint Thomas parecen haber quedado atrás, aunque su actuación en el Giro de Italia sorprendió a propios y extraños. Pero es lógico (de nuevo) pensar que es un ciclista que tiene más años por detrás que los que le queden por delante. Daniel Felipe Martínez Poveda ha tenido oportunidades que no ha terminado de aprovechar. Por tanto, se marcha al Bora Hansgrohe, una vieja aspiración.

Tom Pidcock es muy bueno y cubre un gran campo de acción, no sólo en lo que incumbe a la carretera. Pero no es un Froome que vaya a dominar el ciclismo internacional. Ni es un ciclista de tres semanas como es la marca de la casa. La encrucijada es complicada, porque en el camino se han ido quedando sin las opciones deseadas y las que no lo eran han puesto tierra de por medio. También Pavel Sivakov, quien firma por UAE para ser teórico gregario en esa Guerra Fría que el equipo de los Emiratos mantiene con el Jumbo Visma. A este último se va una de las joyas de la ideología Ineos como Ben Tullett, británico de Kent.

Si fuese una temporada aciaga, se le quitaría hierro. Pero es que en 2022 se les marchó la que era gran apuesta por las Grandes, Richard Carapaz. Y Dylan Van Baarle, con la presencia y seguridad que les daba en las piedras. O Adam Yates, quien se fue a UAE para robarle el podio de París a Ineos. Desde que en 2017 se marchase un Mikel Landa en plenitud, los británicos no habían sufrido bajas tan importantes en su plantilla si no era por retirada o bajada estrepitosa de rendimiento (Froome).

Hay corredores que finalizan contrato y que tienen un peso específico en el equipo como Jonathan Castroviejo u Omar Fraile. Entre otros varios entre los que se podría encontrar el mismísimo Geraint Thomas. Y a continuación mostramos el listado de refuerzos que a día de hoy (25 de agosto) Ineos Grenadiers ha hecho oficial de cara a la temporada 2024:

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A lo mejor no hay motivo para la alarma y la situación está perfectamente bajo control. A lo mejor no es así, pasan las semanas y los fichajes más factibles para mejorar la competitividad de la ya de por sí magnífica plantilla del equipo sellan sus compromisos con otras escuadras. Que cada cual saque sus conclusiones. Es inevitable darle una pensada a la posibilidad de que se vaya a insistir en la opción Evenepoel. Y necesiten hueco para recibir a su séquito.

Pero parece tan imposible a priori que sería una pirueta tan arriesgada que sería algo así como un todo o nada. Demasiados interrogantes en un entorno que no hace tanto solía moverse más en el mundo de la certeza. ¿El dinero puede comprarlo o perderlo todo? ¿Hay algo más?

Fotos: ASO / Vialatte – Ballet – López – Biche