El equipo de Movistar para el Giro de Italia 2024

Aún quedan fechas para la primera gran cita de tres semanas. En mayo dará comienzo un Giro de Italia con ilusiones renovadas para el Movistar, con alicientes y nuevas caras que ofrecer. Bien es cierto que el Giro, dentro de las tres carreras de su especie, es la menos valorada por la marca. La Vuelta por ser la de casa y el Tour por ser el Tour han acaparado más protagonismo en los programas de sus estrellas a lo largo de los más de 40 años de la estructura. En 2024, Nairo Quintana marcará la pauta del conjunto telefónico por tierras italianas. Tanto él como Einer Rubio formarán una dupla colombiana que seguro dará noticias.

Esa dupla de generales tendrá a su lado un ejército de ciclistas que encontrarán en el Giro esa carrera que les permitirá ganar experiencia a la par que ampliar sus galones dentro del equipo. Enric Mas optará por ser de la partida en las otras dos grandes. Oier Lazkano, con casi toda seguridad, descubrirá el Tour. Rémi Cavagna es otro fijo del mes de julio. Para el Giro, lo previsible es que haya ganado prioridad la colonia italiana del conjunto español. Son cuatro los ciclistas transalpinos que forman parte del Movistar 2024, entre los que están ciclistas de gran importancia como Davide Formolo, que puede jugar un muy buen papel en la general o en la búsqueda de etapas. También Davide Cimolai, Manlio Moro, que quizá puede esperar a 2025 para ganar su oportunidad, y Lorenzo Milesi. Todos fichajes, ciclistas que tienen que ganar su hueco.

Fernando Gaviria viene siendo un habitual. En Tour y Vuelta habrá intereses en la general, por lo que el bloque suele estar más dedicado a esa lucha que a la ayuda al también colombiano en los sprints. Esas llegadas masivas que en el Giro serán más habituales que en las otras dos grandes esta temporada. Es probable que entre la entente colombiana y la italiana cubran más de la mitad de las ocho plazas que reserva el Giro para este equipo. Después habrá otras dudas, sin saber aún cómo se conformarán sus calendarios. Como en casos como los de Pelayo Sánchez, Jon Barrenetxea o Javier Romo, a los que la corsa rosa les iría como anillo al dedo.

Por tanto, con Quintana, Rubio, Gaviria, Formolo y uno o dos italianos más, restarían únicamente dos plazas para completar la alineación. El Giro suele ser un destino también para ciclistas que terminan contrato con la estructura. Una especie, si no de castigo, de reserva de la promoción que otorgan las mejores plazas para los ciclistas que vayan a continuar en el proyecto. De ese modo, Carlos Verona disputó el Giro de Italia en su último año con el maillot de Movistar. Mismo caso de Óscar Rodríguez, Max Kanter o José Joaquín Rojas… ¡sólo en 2023! Cuatro de ocho que después causaron baja. Pero todos los integrantes de la expedición del mes de mayo finalizaban contrato.

Alejandro Valverde cumplió en Italia en su última temporada. También el catalán Marc Soler en 2021. Si esta premisa se cumpliese en 2024, Alex Aranburu, el propio Oier Lazkano, Johan Jacobs, Vinicius Rangel, Sergio Samitier o Iván Ramiro Sosa tendrían opción de entrar. Aunque también existe la opción de que aquellos que probablemente abandonen el barco a final de temporada ni siquiera luzcan dorsal en las vueltas de tres semanas. Otros con opción de irse rodando en el Giro esta temporada sean Iván Romeo, con un crecimiento excelente, Carlos Canal, un ciclista rápido que se puede entender con Gaviria y buscar opción en fugas, o Iván García Cortina, por probar nuevos horizontes.

No sería mal paso intermedio para Pelayo Sánchez. Aunque visto su rendimiento de principio de temporada y evolución, está pidiendo a gritos que se apueste por él en el Tour. Porque Jorge Arcas, Gregor Mühlberger, Nelson Oliveira o Will Barta parecen más opciones de Tour en compañía de Enric Mas. Con algún otro lugarteniente como Ruben Guerreiro, Antonio Pedrero o el mencionado Cavagna. Sea como fuere, se presentará interesante la alineación del equipo al tiempo que competitiva.

Nairo Quintana y Einer Rubio pueden perfectamente colaborar para conseguir un puesto entre los diez mejores. Tal vez luchar victorias de etapa en la más alta montaña. Con Gaviria reservado a las etapas llanas, la dispersión del equipo por todos los terrenos puede resultar interesante. Objetivos por fin más allá de ver qué pasa, sin varios de sus mejores hombres en liza. Desde 2019, con las ambiciones claras de Mikel Landa o Richard Carapaz, esto no pasaba.

Fotos: Movistar / Getty