Pelayo Sánchez Mayo cierra una gran actuación en la Vuelta a España. El ciclista del Burgos BH ha sido el mejor ciclista de su equipo de largo, incrustándose en el grupo de los mejores de la clasificación general, sobre todo en las etapas de Asturias, y mostrando un nivel de forma espectacular. Sus capacidades para la escalada estaban fuera de toda duda, pero visto el modo en el que incluso se permitía el lujo de pelear mano a mano ante los primeros espadas del ciclismo español da bastante esperanza de cara a próximos años. El tercer puesto en Guadarrama fue el broche perfecto.
Es un corredor que saltó a la fama a través de su victoria en la última etapa de la Vuelta Asturias, la cual sucedió a las puertas de su casa, en Oviedo. Una victoria real y simbólica que ha redondeado un salto de calidad que le va a llevar a fichar por el Team Movistar en 2024, o al menos todo indica en esa dirección. Esa llegada al World Tour no se puede producir en mejor momento para el corredor astur, que parece haber alcanzado una condición ciclista que va a suponer una inyección magnífica de savia nueva a su futuro equipo.
Del mismo modo, también se verá reforzado el papel de Burgos BH no sólo como destino de corredores tan interesantes como Díaz Gallego o Madrazo, ausente de la Vuelta, sino como vivero de futuros ciclistas que alcancen la cumbre del ciclismo. ‘Pela’ se convertirá en un ejemplo para muchos jóvenes, además de tomar el relevo de un Dani Navarro, que durante años ha sido el mayor exponente del ciclismo asturiano y que cuelga la bicicleta.
En Movistar coincidirá con Iván García Cortina, un gijonés que genera cierto movimiento mediático. Mayo formará parte de otro grupo de ciclistas, más orientados a las vueltas por etapas, como está demostrando en esta Vuelta, incluso yendo a más con el paso de los días. Si en Cruz de Linares a sus 23 años ya fue capaz de luchar y conseguir el pequeño sprint en el grupo de Almeida, Uijtdebroeks o Vlasov, los futurólogos ciclistas van a hacer el agosto con las esperanzas en torno a este corredor.
Que no se vea ese resultado como algo aislado, porque no lo es. Que los pupilos de Unzué le hayan echado el ojo no es casualidad, y este asturiano viene ofreciendo esperanzadores motivos para firmar por un equipo más grande de hace un tiempo. En la Challenge de Mallorca consiguió un segundo puesto. Sólo le separó de la victoria un enrachado Kobe Goossens. Allí se impuso a Lennert Van Eetvelt, un joven belga con el que ha coincidido a destacar en la Vuelta a España.
Fue quinto en el Tour du Doubs en el que se impuso Jesús Herrada. Con Guillaume Martin o Thibaut Pinot, además del conquense, en el grupo que se jugó la victoria, y con el asturiano dentro. Buenas actuaciones en GP Beiras, donde fue tercero, o en O Gran Camiño, donde anduvo cerca de colarse en el top ten pese a los buenos nombres que allí disputaron. También se comprueba que el de Tellego es capaz de desarrollar con éxito dos picos de forma a lo largo de una temporada.
Precisamente Enric Mas declaraba que el Movistar alineado en la Vuelta era poco eficiente en montaña. Si finalmente se confirma el pase de Pelayo al conjunto telefónico, tendrá un motivo menos para sentirse inseguro en las rampas. Sobre todo si el asturiano continúa evolucionando a este nivel. Pero por el momento es tiempo de disfrutar lo que ha aportado en el Burgos BH, un equipo que se está acostumbrando en los últimos años a ser muy protagonista en la Vuelta a España.
Fotos: Burgos BH / Sprint Cycling Agency
