El regreso a casa de Caleb Ewan

A veces las historias tienen un principio, un desarrollo y un final, sin compartir necesariamente origen y destino. El caso de Caleb Ewan supone el cierre de un círculo. De una trayectoria que comenzó precisamente en Jayco cuando Jayco era la academia de futuros talentos del World Tour. Es más, se llamaba Jayco-AIS World Tour Academy, siempre operado por el Green Edge, que ha sido la raíz del árbol australiano que supera ampliamente la década de existencia. Un proyecto que tiene garantizada la continuidad hasta 2026 y que contará con el sprinter australiano hasta finales de 2025.

Son 29 años con los que llega a las filas del equipo de su tierra tras un periplo de cinco años en Lotto, casa de otro velocista aussie como fue el respetado Robbie McEwen. Aquel tuvo la opción de competir bajo los colores del recién nacido Orica, aunque fuese únicamente durante unos meses. En mayo, tras el Tour de California, colgó la bicicleta y descolgó el micrófono. En este caso, Ewan ficha por Jayco con una intención bien diferente, que es el regreso al World Tour. La búsqueda de un electroshock que reactivase su carrera.

Jayco sufrió la baja de Kaden Groves, que se ha instalado a la perfección en el Alpecin de Van der Poel. Esa vacante de velocista puro quedó libre y pese a los esfuerzos de Dylan Groenewegen queda mucho terreno por cubrir. Sí, los australianos tienen a una estrella como Michael Matthews, apoyada por el liderazgo de Simon Yates y reforzando de forma importante el equipo en todas las líneas. El fichaje de Mauro Schmid va a ser importante. Así como la sido la incorporación de Chris Harper en 2022 para elevar de forma decisiva el nivel medio de la plantilla.

Con la evolución de algunos ciclistas como Zana, Berhe, Dunbar o Hamilton, el equipo puede tener más peso en 2024. Ewan firma para aportar esa experiencia en los metros finales y esa capacidad para estar ahí. Ganar es difícil, porque los sprinters funcionan por rachas, por momentos de inspiración. Eso se tendrá que ver, pero lo que sí se puede decir es que la formación australiana gana mucha entidad para ir acudiendo una a una a las carreras de la próxima temporada con opciones de triunfo. Y de sumar puntos, cuestión importante en este contexto del World Tour.

Cierra 2023 con dos victorias: Schwalbe Classic y Van Merksteijn Fences Classic. A añadir a seis segundos puestos, uno de ellos en el Tour, donde no gana desde 2020. No ha sido un año fácil, con lesiones y algo que un sprinter necesita como el comer, que es marcar gol, la confianza. Por ello, el acuerdo entre ambas partes ha sido fácil para rescindir su contrato y de esa manera poder regresar a casa, el lugar donde Caleb se hizo una estrella del ciclismo. Uno de los velocistas más rápidos en los últimos metros debido a su enorme potencia en ese último esfuerzo de cada etapa.

Atrás quedan los años en los que fue considerado el mejor del mundo en su faceta. Bien es cierto que pese a no haber alcanzado la treintena, comenzó su trayectoria profesional muy joven, triunfando ya con 21 años en la quinta etapa de la Vuelta España, su primer gran triunfo. Once victorias parciales en grandes vueltas hasta la fecha, 61 en total. Datos que le ubican en tercera posición del ranking de triunfos con bandera australiana, tras Robbie McEwen (115), Phil Anderson (71) y ya él mismo, a 10 victorias de la segunda posición. ¿Conseguirá superarle? El reto es difícil si no encuentra la chispa, pero para eso se ha marchado a Jayco, para recuperar viejas sensaciones.

Fotos: ASO / López & Ballet