En el mundo del ciclismo, pocos corredores han encarnado el arte de la resiliencia como Primož Roglič. Su historia es un testimonio de cómo la adversidad puede transformarse en fuerza. Haciéndonos eco de su reciente entrevista con el medio esloveno «Delo» ofrece una mirada profunda a su incansable espíritu de superación.
Primož Roglič, conocido por su talento y determinación, ha tenido una relación tormentosa con el Tour de Francia. Desde su cercano segundo puesto en 2020, cuando Tadej Pogačar lo desbancó en el último momento, cada año ha presentado nuevos desafíos. En la edición de 2024, las caídas durante la segunda semana le forzaron a abandonar, un golpe duro en una carrera que siempre ha sido su gran objetivo.
En la entrevista con «Delo», Primož Roglič se mostró vulnerable al compartir sus pensamientos más íntimos. “Cuando me volvió a pasar lo que me pasó, mis pensamientos fueron en la dirección de qué necesito, y ya no necesito formar parte del mundo del ciclismo y sufrir todo esto,” confesó. Esta última fractura de vértebra lumbar, resultado de las caídas, le hizo contemplar seriamente su futuro en el deporte.
El recorrido de Primož Roglič es una lección sobre cómo enfrentar y superar la adversidad. Su camino ha estado lleno de contratiempos, pero cada obstáculo ha sido una oportunidad para demostrar su fortaleza. En 2021, a pesar de las lesiones, se alzó con el oro olímpico en contrarreloj. En 2022, una caída que fracturó sus vértebras no lo detuvo; volvió a su mejor forma y, en 2024, conquistó su cuarta Vuelta a España, igualando el récord de Roberto Heras.
El proceso de recuperación del 4 veces ganador de La Vuelta ha sido impresionante. A pesar del dolor persistente y los desafíos constantes, ha sabido mantener una mentalidad positiva y enfocada. “Lo que siguió fue mirar hacia adelante y darme cuenta de que nunca me quedo sin nuevos retos. Por supuesto que siento el dolor, no es agradable,” explicó. El apoyo incondicional de su familia y seres queridos ha sido fundamental en su viaje de regreso al éxito.
Con los 35 años a la vuelta de la esquina, Primož Roglič sigue demostrando que su espíritu competitivo está lejos de agotarse. Con los Mundiales de Zúrich en el horizonte y una asociación prometedora con Tadej Pogačar, el esloveno continúa siendo una fuerza de la naturaleza en el ciclismo. La historia de Primož Roglič es más que un relato de victorias y derrotas; es un reflejo de la tenacidad y la pasión que definen a los verdaderos campeones.
Soy Álvaro Ruiz, un amante del ciclismo que encuentra en cada carrera una historia fascinante. Mi objetivo es compartir con ustedes esas historias de esfuerzo y dedicación que hacen del ciclismo un deporte tan especial.